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Una comitiva presidencial, encabezada por el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, quien deja el cargo el próximo 15 de agosto, realizó una última visita al Alto Paraná. El denominado día de gobierno se desarrolló específicamente en Hernandarias, luego de haber participado de un acto oficial en Caaguazú.
Primeramente el mandatario presenció la habilitación del Centro Tecnológico Task para el desarrollo de la industria autopartista y la puesta en marcha del Plan Piloto de Movilidad Eléctrica en el país con el apoyo del gobierno de Corea. El establecimiento está ubicado en el predio del Parque Tecnológico ITAIPU Paraguay (PTI).
De allí se trasladó al barrio María Auxiliadora para participar de la inauguración de la novena estación propia de Petropar, para rápidamente desplazarse al Centro Ambiental de Itaipú Binacional, para la apertura oficial del Vivero Forestal y Huerto de Plantas Medicinales.
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En su agenda estaba previsto un recorrido por la nueva Penitenciaría de Minga Guazú, para una verificación de las obras, sin embargo no asistió al encuentro, aparentemente para no encontrarse con una manifestación de vecinos, quienes lo aguardaban para realizar reclamos.
Magnicidio en Ecuador y el crimen organizado en Paraguay
Durante su recorrido Mario Abdo se hizo eco del asesinato del candidato presidencial de Ecuador, Fernando Villavicencio, calificando el hecho como un suceso de trágico para la democracia y que es fruto de la permeabilidad del crimen organizado.
”Esos son los episodios que tenemos que tratar de evitar, el Estado paraguayo es la única herramienta que tenemos para la lucha eficiente contra el crimen organizado, si el Estado está subordinado o está permeado por el crimen no hay esperanza para la sociedad”, sostuvo.
Agregó que las instituciones del Estado tienen que estar al servicio del rol constitucional que le corresponde, siendo uno de los principales la lucha contra el crimen organizado.
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“Cuando el Estado no cumple su rol ocurren estas desgracias que estamos viendo en otras democracias; una de las mayores amenazas que tienen los Estados en el mundo es el avance y la permeabilidad del crimen organizado en todos los estamentos, en la política, en la burocracia pública, en las empresas privadas, en el periodismo, en todos lados”, dijo.
En ese sentido, añadió que espera que “se siga fortaleciendo un Estado que esté decididamente confrontado con el crimen organizado y no sea su aliado”.
Entre otras cosas alabó las acciones de su gobierno e hizo mención a que en su mandato se ha instaurado una cultura del diálogo, que se implementó con distintos sectores. Agregó estar convencido de dar todo su apoyo al presidente electo Santiago Peña y que eso se ha demostrado en la gestión de traspaso de mando, que se está ejecutando de forma ordenada.