En Alto Paraná hay un grave déficit de camas de terapia intensiva, sobre todo para recién nacidos, que no dan abasto a la gran demanda. Solo en el Hospital Regional de Ciudad del Este hay diez partos al día, muchos de los neonatos tienen complicaciones.

Actualmente, solo hay diez camas de UTI para niños, seis en el Hospital Los Ángeles (con algunos equipos del Ministerio) y cuatro en el Hospital Regional de IPS. Mientras que en el Hospital Regional del Ministerio de Salud ahora se está reformando un pabellón para contar con ocho camas de UTI, cuatro para neonatos y dos para niños.

Lea más: Plantean declarar emergencia sanitaria en Alto Paraná por falta de UTI neonatal

El director del citado centro asistencial, doctor Federico Schrodel, admitió que hay una falencia en cuanto a la cantidad de camas de UTI. Esto teniendo en cuenta que conforme a los cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el requerimiento mínimo es contar con una cama de UTI por cada 10.000 habitantes, es decir 0,1% de la población, que serían unas cien camas para el décimo departamento.

“Estamos lejos de eso, creo que con estas seis camas vamos a ayudar bastante. Se requiere aumentar el número de camas de neonatales para el departamento, es fundamental para nosotros”, expresó.

El pabellón del hospital de Ciudad del Este, en reforma

El pabellón del Hospital Regional de Ciudad del Este que se está reformando para la habilitación de UTI para niños y recién nacidos había sido construido como centro de contingencia para el covid-19, por parte de la municipalidad local, en el 2020.

Una vez finalizada la obra de otro pabellón de contingencia construido por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), este pabellón se utilizará para pacientes terapizados. Es decir, con todos los equipos de terapia, pero en un espacio físico provisorio, al no reunir todos los requerimientos.

Te puede interesar: Desesperada búsqueda de UTI neonatal

Actualmente se están haciendo readecuaciones para cumplir con las especificaciones técnicas como el cambio del ducto de gas medicinal en la parte externa, ya que estaba instalado en la parte interna de la sala. Además, se hizo apertura de puertas y otras readecuaciones.

Las obras están en su fase final y luego se deberán hacer las licitaciones para completar los equipamientos, ya que en cuanto a recurso humano ya estarían cubriendo con el personal del hospital.

Un equipo del Ministerio de Salud encabezado por el jefe de terapia intensiva, Ángel Núñez verificó este miércoles el avance de las obras. Se estima que la readecuación estructural termine en dos semanas.