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El Tribunal de Sentencia, conformado por Óscar Genez, Lourdes Morínigo y Evangelina Villalba, declaró culpable por los hechos punibles de abuso sexual en niños, violación de la patria potestad y violencia familiar al guardia, y lo condenó a 15 años de prisión.
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Según la acusación de la fiscala Emilce Ovelar de Rodríguez, los hechos se produjeron a mediados de 2020 cuando el acusado inició acercamientos a una niña de 13 años, quien fue sometida sexualmente y quedó embarazada.
Al enterarse de la gravidez, el agresor sexual se presentó en la casa de la víctima, conversó con el padre de la niña y le exigió llevar consigo a la infante, a fin de concretar una convivencia. Sin embargo, el papá se negó a tal petición.
Ante la negativa, la niña amenazó a su padre con acusarlo de abuso si continuaba oponiéndose a la convivencia entre ella y el acusado, según la investigación fiscal.
Luego, la afectada abandonó su hogar y se fue a vivir con el abusador. Durante ese tiempo, la víctima era mantenida encerrada y además constantemente sometida a castigos físicos por parte del hoy condenado, a raíz de sus celos enfermizos.
Reveló su calvario al padre
El 3 de febrero de 2021, la víctima regresó a su hogar y reveló a su padre el calvario que padeció bajo el poder del procesado.
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Pese a los intentos del padre por convencerla de presentar una denuncia ante la Fiscalía, la niña se negó argumentando que no quería que el padre de su hijo terminara en prisión.
Finalmente, el progenitor de la víctima presentó la denuncia a través del Servicio de Atención Telefónica 147, el cual remitió los antecedentes del caso al Ministerio Público, que inició la investigación y rescató a la menor, quien para ese entonces había regresado con el acusado.
Además, se ordenó que la víctima fuera examinada por un médico forense, quien constató un gran número de lesiones.
Omitimos los datos personales del condenado para resguardar la identidad de la víctima, en cumplimiento del Código de la Niñez y la Adolescencia.