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La joven de 22 años Nanci Verdún vivía torturada por su pareja, según los datos recabados por el fiscal Édgar Torales. Varios testigos confirmaron que era sometida constantemente a agresiones físicas. Su cuerpo fue encontrado ayer en un pozo de agua en el predio de un inquilinato del barrio Santa Ana de Ciudad del Este.
Mario Diosnel González Sandoval había entregado a la Policía Nacional una carta supuestamente escrita por Nanci y en la que supuestamente afirma que se arrojaría al pozo.
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Sin embargo, en la inspección forense se detectaron varias lesiones llamativas, como una herida cortante en la zona del cráneo, excoriaciones en región escapular, hematoma en región toraco abdominal. Además presentaba cianosis en los dedos de las manos, equimosis en región lumbar, además de signos de asfixia.
Para una mejor determinación de la causa de la muerte, el fiscal Torales dispuso la realización de una autopsia al cuerpo, cuyo resultados estarían dentro de algunos días.
Vivía golpeada, según testigos
Varias declaraciones testificales de familiares y allegados de la pareja confirmaron que Nanci era sometida a frecuentes castigos físicos. En una de las ocasiones se refugió en la casa de familiares tras recibir una golpiza. Había referido que el hoy imputado le tomó del cuello y la arrojó por la pared.
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En reiteradas ocasiones la joven aparecía con hematomas en cuello y otras partes del cuerpo. En otra ocasión la golpiza le habría provocado un aborto a la hoy víctima fatal. Los testigos relataron que estando con cuatro meses de gestación recibió una patada en el vientre de parte de González Sandoval.
También se supo que la joven era despojada de todo su dinero y le dejaban sin comer al igual que a su hijo pequeño, por lo que terminó entregándolo a su padre biológico.
Imputación y pedido de prisión
Al reunir varios elementos de sospecha, el fiscal Édgar Torales imputó a Mario Diosnel González Sandoval por el supuesto hecho de feminicidio. “Las circunstancias de la muerte, conforme a las informaciones que constan en la carpeta de investigación fiscal, son elementos de sospechas suficientes para sostener que no se trata de un suicidio, sino que la víctima sufrió una asfixia mecánica y fue golpeada en la cabeza, de cuya consecuencia falleció, siendo tirada su cuerpo en el pozo”, refiere la imputación.
El sospechoso se encuentra preso en la Dirección de Policía de Alto Paraná a disposición del Juzgado Penal de Garantías, pues el fiscal también pidió que se ordene su prisión preventiva, teniendo en cuenta que se expone hasta a 30 años de cárcel.