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El fiscal Julio Paredes acompañado de una comitiva de la ANDE efectuó el allanamiento de un depósito de esta capital departamental. En el lugar estaban funcionando centenas de procesadores de criptomonedas, utilizando energía eléctrica de forma irregular.
Los técnicos de la Ande explicaron que constataron la existencia de una conexión clandestina de media tensión conectado a un transformador exclusivo el cual abastecía a la propiedad donde funciona una granja de criptomonedas. Con estos datos formularon una denuncia por sustracción de energía eléctrica ante la Fiscalía.
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El suministro de la ANDE figura a nombre de Chia Jung Li pero no se pudo determinar si la misma ocupaba el predio o fue concedido a terceras personas.
Fredy González, de la Asesoría Jurídica de la ANDE, explicó que no podían hacer una verificación exhaustiva de las conexiones por lo que tuvieron que recurrir a la Fiscalía. “Constatamos una cantidad considerable de equipos que estaban usufructuando la energía eléctrica sin que eso pase por el medidor para la facturación.
Como diligencia investigativa, el fiscal Julio Paredes se constituyó en el lugar y confirmó que gran parte de la energía eléctrica que se utilizaba en el depósito no pasaba por el medidor habilitado. “A prima facie existe la sustracción de la energía porque no posee medidor habilitado para el consumo de toda la energía”, expresó.
Por orden fiscal se procedió al corte de la conexión irregular, además se decomisaron los aparatos e incluso el transformador. La ANDE estima un perjuicio patrimonial de G. 1.543.607.652 por el robo de energía eléctrica que se habría dado durante el periodo de un año.