Este miércoles, el nivel del río Paraná registra 22,9 metros sobre el nivel del mar, es decir 29 centímetros menos que ayer, cuando la marca registrada fue de 23,19 metros, y que ocasionó que diez casas del barrio San Rafael quedarán inundadas, al igual que calles y plazas.

Los raudales que recorren estas calles están repletos de basura de todo tipo como botellas, bolsas de plásticos, vasos descartables, pañales, cubiertas, trozos de madera, entre otros.

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Los pobladores relataron que el agua expide un olor nauseabundo, sobre todo en día de mucho calor. Además indicaron que algunas personas desechan residuos cloacales al cauce.

Mario González, quien reside en el barrio hace 44 años, dijo que antiguamente el arroyo era cristalino y que incluso se utilizaba para el consumo.

“Antes era cristalino, ahora los vecinos que no quieren pagar el servicio de recolector de basura tiran los residuos al arroyo”, contó. Ahora está lejos de ser apto para consumo, pues en algunos sectores, el arroyo está totalmente cubierto por la basura.

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El poblador dijo, además, que la asistencia a los afectados es escasa, pues necesitan asistencia médica y el refugio con carpas no es suficiente para resguardar sus pertenencias.

Ocasional olla popular

La Municipalidad de Ciudad del Este realiza entrega de alimentos a los damnificados, pero de forma ocasional.

Este martes, los funcionarios de la Dirección de Desarrollo Social realizaron la jornada de asistencia en el barrio San Rafael, mediante una olla popular.

Desde la comuna afirman que se realiza un monitoreo sanitario dentro de las carpas instaladas para la protección de los damnificados.