Cargando...
El Hospital Regional de Ciudad del Este fue sede de una reunión entre una comitiva del Ministerio de Salud, representantes de la Décima Región Sanitaria y de otras instituciones para evaluar situación epidemiológica en Alto Paraná. Esto considerando la explosión de casos de chikunguña en Asunción y departamento Central.
A su llegada al encuentro, el doctor Guillermo Sequera, titular de la Dirección General de Vigilancia de la Salud, fue abordado por periodistas sobre los casos chikunguña y refirió que actualmente la epidemia está centrada en el área metropolitana de Asunción, pero que hay un riesgo de amenaza de dispersión.
“Esta es una enfermedad que va a tomar fuerza en las grandes urbes, las grandes ciudades, los grandes centros urbanos, después del Área Metropolitana de Asunción está Ciudad del Este y sus municipios aledaños -Presidente Franco, Minga Guazú y Hernandarias- y no queremos que aquí tome fuerza (la epidemia)”, sostuvo.
Lea más: Confirman ocho casos de chikunguña en Alto Paraná
Seguera mencionó que una de las principales preocupaciones es que el sector privado, especialmente laboratorios y hospitales, no está notificando, ya sean casos de dengue o chikunguña, y que este proceso es muy importante teniendo en cuenta que a partir de ahí se pueden activar las diferentes medidas para combatir las enfermedades.
“Alto Paraná lastimosamente es una de las regiones históricamente que peor notificación tiene porque los privados son los que no notifican, no les interesa notificar y no saben el daño que terminan haciendo a la salud pública de la región”, cuestionó. Siguió diciendo: “¿Vamos a empezar a contar los muertos y ahí nos vamos a despertar?, ahora hay que actuar”.
Se habla de una situación epidemiológica incipiente en Alto Paraná, en comparación con Asunción y alrededores, pero el propósito de la visita de la comitiva de salud es anticipar acciones a fin de evitar una explosión de casos.
El director de Vigilancia de la Salud socializó que los últimos datos que recibió hacen referencia a unos 140 internados y más de 20 personas en terapia intensiva. “Acá los que más se internan y los que más fallecen son los dos extremos de la vida, los ancianos y de edades menores a un año”, detalló.