Yonatan de Jesús López Cabañas (21) fue imputado por frustración a la persecución penal por la fiscala Olga Melgarejo. López Cabañas es sindicado de haber ayudado a un prófugo de la Justicia a quien la Policía intentaba detener cuando erraron de objetivo y terminaron acribillando a una pareja, convirtiéndose en un supuesto caso de gatillo fácil.

Según la investigación, el citado López Cabañas supuestamente habría ayudado a escapar a un forajido de la Justicia, de nombre Carlos Cabrera Cabrera, quien cuenta con captura por varios hechos punibles.

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Cabrera estaba siendo buscado por la Policía. Un grupo de agentes de investigación de hechos punibles y del grupo táctico GEO montó un retén, luego de que recibieran información de que estaba circulando por la zona. Específicamente estaban a unos 6 kilómetros de la ruta PY02, lado Monday.

Cuando divisaron un vehículo similar al del buscado abrieron fuego y terminaron asesinando a Alex Enrique Alejandro Ortiz Estigarribia e hiriendo de gravedad a Gloria Yesica Espínola Cáceres.

El auto de las víctimas, que acusó al menos 23 disparos de arma de fuego, fue movido del lugar y abandonado a unos kilómetros.

Según los investigadores, tras la balacera, López Cabañas habría utilizado una motocicleta para trasladar al presunto delincuente hasta una zona boscosa, desde donde logró escapar.

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De esa manera, López Cabañas habría impedido que Cabrera fuera encontrado por agentes policiales que realizaban un rastrillaje por los alrededores. Por tal motivo, fue privado de libertad y sometido a proceso.

Prisión preventiva

La fiscala Melgarejo solicitó la prisión preventiva del imputado, considerando su falta de arraigo y el peligro de fuga existente. El mismo se encuentra recluido en la Dirección de Policía de Alto Paraná, a disposición del Ministerio Público y el Juzgado de Garantías.

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La madre Yonatan de Jesús López Cabañas afirmó que su hijo fue obligado por el delincuente a ayudarlo. Contó que son conocidos de la zona sur del Alto Paraná y que en la noche del sábado llegó con el auto baleado en la casa donde vive su hijo y lo obligó a acompañarlo.

Aseguró que su hijo fue torturado y que fue injustamente privado de su libertad. Igualmente, cuestionó duramente la actuación de los agentes policiales.

El operativo fatal

Al menos 11 agentes policiales que participaron del operativo fatal fueron imputados y con pedido de prisión preventiva. Los procesados son el comisario Hugo Regis Florentín (50), el subcomisario Manuel Ramón Villalba Gómez (41) y el suboficial principal Richard Antonio Sebriano Silvero (45), todos integrantes de la División de Investigación de Delitos de Alto Paraná.

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Además del oficial primero Roberto Samaniego Parquet (32) y los suboficiales César González Agüero (24), Javier Antonio Martínez Ocampos (29), Alfredo Villalba Agüero (26), Rubén Darío Giménez Maidana (41), Jaime Javier Ramírez Brítez (33), Alder Centurión Céspedes (35) y Pedro Osvaldo Brítez Achar (35), integrantes del Grupo Especial de Operaciones (GEO).

En prosecución de la pesquisa, el Ministerio Público colectó varias evidencias relacionadas al hecho, como ser los proyectiles extraídos del cuerpo de la víctima fatal, tomas de muestras de manos de los involucrados e incautación de armas de fuego y otras evidencias que fueron remitidas bajo cadena de custodia al laboratorio forense de la Fiscalía General del Estado para la realización de distintas pericias.