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En Anora, Baker se mantiene fiel a su habilidad para retratar escenarios poco convencionales, como los barrios de Brighton Beach y Coney Island en Nueva York. Las tomas vibrantes de estas áreas, combinadas con las de Las Vegas, aportan una energía visual fascinante que se alinea con el ritmo frenético de la película.
La actuación de Mikey Madison, en el papel de Ani, destaca como el punto más sólido del filme. Madison aporta dinamismo y autenticidad al personaje, logrando sostener la atención incluso cuando el guion se torna repetitivo. Mark Eydelshteyn, como Ivan, complementa con una energía errática que refuerza la química entre los protagonistas.
Sin embargo, la duración de 138 minutos se siente excesiva, con escenas que pudieron ser recortadas para mantener un ritmo más consistente. Aunque el humor logra momentos entretenidos, el cambio abrupto entre situaciones románticas y absurdas, al estilo de películas como Proyecto X, rompe el equilibrio.
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Baker sigue explorando temas recurrentes en su filmografía, como en Tangerine (2015), donde también abordó la vida de trabajadoras sexuales con una mezcla de empatía y crudeza. Sin embargo, en Anora, el director parece inclinarse hacia un enfoque más comercial, dejando de lado parte de la aspereza que definió sus primeras obras. La comparación con Red Rocket (2021) es inevitable: ambas películas muestran protagonistas atrapados entre la ambición y la marginalidad, pero Anora carece de la profundidad que hizo memorable a sus trabajos anteriores.
La trama de Anora se siente como una mezcla distorsionada de Pretty Woman y Cenicienta, sin aportar una perspectiva fresca. La historia de Ani, una trabajadora sexual, y su relación con Ivan, un joven multimillonario adicto a los excesos, parece más motivada por el interés personal que por un amor genuino. Aunque la película intenta reflexionar sobre las diferencias sociales y la lucha de Ani por su dignidad, el mensaje se diluye en un guion que no ofrece nada nuevo.
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Además, el conflicto central, donde los padres ricos de Ivan desaprueban su relación con Ani, resulta predecible y carente de innovación. Este tema ha sido abordado con mayor impacto en otras obras, y Anora no logra destacarse ni dejar una huella memorable en este aspecto.
Anora es una película técnicamente sólida, con actuaciones destacadas y una dirección visual que demuestra el talento de Sean Baker para capturar la humanidad en escenarios únicos. Sin embargo, el guion no alcanza la complejidad emocional ni la originalidad esperadas, dejando al espectador con la sensación de que la película, aunque entretenida, no está a la altura de los mejores trabajos del director. Es un esfuerzo ambicioso que, a pesar de sus destellos de brillantez, se queda corto al intentar combinar comedia, romance y crítica social en un mismo relato.
Ficha Técnica: <i>Anora</i>
- Calificación: 2/5
- Título original: Anora
- Año: 2024
- Duración: 138 minutos
- País: Estados Unidos
- Dirección: Sean Baker
- Guion: Sean Baker
- Música: Matthew Hearon-Smith
- Fotografía: Drew Daniels
- Reparto principal: Mikey Madison, Mark Eydelshteyn, Yura Borisov
- Compañías de producción: Cre Film, Filmnation Entertainment
- Distribuidora: Neon
- Género: Comedia, drama
- Sinopsis:Anora, una joven prostituta de Brooklyn, parece encontrar su final feliz cuando se casa impulsivamente con el hijo de un oligarca ruso. Sin embargo, el cuento de hadas se ve amenazado cuando los padres del joven viajan a Nueva York con el objetivo de anular el matrimonio.
