Aún no sabe las fechas de la gira pero Alborán adelantó que comenzará en Latinoamérica en febrero y seguirá en mayo en España: “Solo puedo avanzar que estamos trabajando de manera intensa en ella porque va a ser difícil. Llevar este disco al directo necesita tiempo, quiero que sea especial”.
Además precisó que en lugar de las usuales firmas de discos, su intención es que haya “unos encuentros” pero que aún no podía desvelar el formato.
“Me encanta estar cerca del público, ojalá salgan bien, no solo firmar discos, sino también charlar, cantar y que sea un poquito más especial”, señaló.
El malagueño, que concluyó la rueda de prensa interpretando al piano Prometo, afirmó que sigue “siendo muy niño, muy payaso” aunque ya no es “tan impaciente” e intenta tomarse las cosas “con más calma”.
“Antes lo quería todo ya. Cuando paré, era como 'basta', no puedo más y con este disco quiero pelear lo que haga falta y dejarme el alma y la piel”, dijo el cantante, que admitió que, en cierta forma, se retiró porque había perdido el norte.