Gran parte de la comunidad uruguaya se dio cita en un acto en el que se bailó tango y se vibró al ritmo de los tambores del candombe en un escenario levantado frente a la figura de Artigas, nacido en 1764 en Montevideo y fallecido en 1850 en Paraguay.
El programa musical también estuvo animado por el cantautor y periodista paraguayo Mario Cassartelli, quien hizo un recorrido por el cancionero más emblemático de la América de habla hispana.
El plato fuerte fue la versión que los jóvenes músicos de la Orquesta de Cateura hicieron de La Cumparsita, la inmortal pieza del uruguayo Gerardo Matos Rodríguez (1897-1948).
La agrupación ha recorrido el mundo con la música que sale de unos instrumentos que son elaborados con desechos de esa escombrera de Asunción.
En 1997, el Poder Legislativo uruguayo la declaró Himno Cultural y Popular del país sudamericano.
En setiembre de 2009, la Unesco declaró el tango Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad, iniciativa que fue promovida en forma conjunta por Uruguay.