“No tener documentos no puede ser un crimen. Todos somos iguales”, lamentó el artista en entrevista telefónica con Efe tras visitar esta semana el Centro de Detenciones de Eloy, en el desierto de Arizona (EE.UU.).
El cantante de A Dios le pido señaló que esta “dura experiencia” le ayudó a comprender más la crisis migratoria porque pudo “conectar” las noticias y estadísticas con “las caras” de estos indocumentados y sus dramas “desgarradores”.
“Es bastante difícil de comprender que te paren en la calle porque tienes un aspecto diferente, latino, y en el acto te criminalicen inmediatamente solo porque no tienes documentos”, manifestó el músico, que reside en Miami.
Para el colombiano, la mayoría de las personas que huyen a este país “es porque quieren mejores oportunidades, no porque vengan a ser criminales”.
Además de escuchar a dos mujeres inmigrantes “que no se pudieron contener”, pues le estaba prohibido hablar con los detenidos, Juanes indagó sobre las prisiones privadas y las cuotas de inmigrantes en estos centros de detención bajo la responsabilidad de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por su sigla en inglés).
“Cuando entiendes que detrás de esto hay un gran negocio, de estas cárceles privadas, le da a uno muy duro”, indicó el colombiano, quien fue invitado a cantar en las afueras de Eloy por el músico estadounidense John Legend como parte de su lucha contra las “equivocadas políticas carcelarias del país”.
Juanes se unió así a #FreeAmerica, una campaña del cantante afroamericano, ganador de nueve premios Grammy, que insta a acabar la detención masiva de inmigrantes como parte de una transformación del sistema criminal de justicia.
Grupos civiles y proinmigrantes nacionales han cuestionado que el sistema de cupos, que insta a ICE a mantener ocupadas unas 34.000 camas diariamente, fomenta la “avaricia” de las corporaciones, que ven en los indocumentados una lucrativa oportunidad.
“Este negocio debería cerrar”, manifestó Juanes al referirse sobre los cerca de 160 dólares que paga Inmigración diariamente por cada uno de estos inmigrante detenidos.
Juanes, quien recorrió con Legend el centro de detención, con capacidad para unos 1.500 inmigrantes, lamentó que el trato “verbal y sicológico” que se da a los indocumentados “no difiere del que se le da a los verdaderos criminales”. De igual forma dijo estar sorprendido por las “extremísimas normas de seguridad”.
“Hay que humanizar el tema de la inmigración, no pueden ponerlos a todos en el mismo saco. Son seres humanos con buenas intenciones que solo quieren trabajar para darle un mejor futuro a su familia”, manifestó el ganador de 21 premios Grammy Latino y 2 Grammy anglosajones.
Juanes y Legend cantaron juntos sobre la plataforma de un camión en las afueras de Eloy; visitaron luego la polémica “Ciudad de las carpas”, una cárcel al aire libre del alguacil antiinmigrante Joe Arpaio, y tuvieron la oportunidad de hablar con familiares de los detenidos.
Juanes, quien es muy afín a las causas sociales, entre ellas su campaña contra las minas antipersonas, reactivó su llamado al Gobierno estadounidense de luchar por una “reforma migratoria justa”.
“Este país es de inmigrantes, así se construyó, lo que es la Constitución es contrario a lo que se está predicando”, criticó.
El colombiano además invitó a abordar la problemática migratoria con una visión más amplia y compartida, al señalar que estos inmigrantes de alguna forma han huido de “una violencia generalizada que ha sido generada por muchas razones”.
“Todos estos temas de corrupción y de droga que han generado tanta violencia en nuestros países no han sido solo por nosotros, sino porque este país (EE.UU.) es el mayor consumidor (de drogas). Todo está conectado, y no se puede juzgar a los inmigrantes de esa manera”, manifestó Juanes.