Según confirmaron hoy a Efe fuentes de la organización, se trata de la mayor cifra obtenida en este evento anual que sirve como pistoletazo de salida para la temporada de conciertos de verano en el Hollywood Bowl, uno de los recintos de conciertos más famosos de California.
El año pasado se consiguieron 1,2 millones, y la mejor marca previa se obtuvo en 2011, con 1,4 millones.
Esa cantidad irá destinada a los más de 150.000 jóvenes, familias y profesores asociados a los distintos programas musicales y educativos de la Filarmónica.
Los miembros de Journey estuvieron acompañados por la orquesta del Hollywood Bowl, la orquesta juvenil de Los Ángeles (YOLA) y el coro del Instituto para las Artes del condado de Los Ángeles (LACHSA).
YOLA es un modelo educativo construido a imagen y semejanza del Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela (conocido como "El Sistema") creado en 1975 por José Antonio Abreu, del que se han beneficiado cientos de artistas jóvenes, incluido Gustavo Dudamel, director de la orquesta Filarmónica de Los Ángeles.
“Estamos tocando por primera vez con una orquesta y un coro”, dijo el vocalista de la formación, Arnel Pineda, “así que hemos rebuscado entre nuestra catálogo para dar con canciones que se ajustan a ello y que no hemos tocado en mucho tiempo ” .
La banda apostó por algunos de los temas más conocidos de su carrera, como Only the Young, Any Way You Want It y su célebre Don't Stop Believin, y también por canciones menos populares como Be Good to Yourself, Open the Door y City of Hope, entre otras.
El Hollywood Bowl albergará en las próximas semanas conciertos de Ed Sheeran, Basement Jaxx, Death Cab for Cutie, Harry Connick, Jr., Sheryl Crow y Diana Krall, entre otros artistas.