“Habiendo personas desaparecidas, nosotros no podemos descartar otras personas fallecidas”, señaló Marcelo Sobrino, fiscal general del Departamento Judicial de la ciudad Azul, que abarca a la localidad de Olavarría, 360 kilómetros al noroeste de Buenos Aires, donde tuvo lugar la tragedia.
En declaraciones a radio La Red, Sobrino reveló que no cuentan con un registro de desaparecidos -los medios locales calculan unos 300-, pero sí con la información de otros asistentes y familiares que les han manifestado su preocupación por el caso de personas de las que se desconoce su paradero desde el sábado.
Incluso, hay iniciativas en las redes sociales para recopilar testimonios y fotografías a fin de localizarlos.
Mientras tanto, la Justicia continúa investigando las circunstancias del concierto en el que se estima que hubo unas 180.000 personas, más de las 170.000 que inicialmente estaban previstas.
Pese a las advertencias del público y del propio cantante, que se vio obligado a interrumpir su actuación varias veces, una oleada de gente sobrepasó a los encargados de seguridad y provocó una avalancha que presionó a los asistentes de las primeras filas y causó la muerte de los dos hombres y decenas de heridos.
Según confirmaron fuentes médicas a la agencia estatal Télam, las tres personas que continúan hospitalizadas este martes (dos en Olavarría y una en Azul) “evolucionan favorablemente”.
El domingo la fiscal del caso, Susana Alonso, tomó declaración como testigo a Solari, quien hasta el sábado llevaba un año retirado de los escenarios por la enfermedad de Parkinson que padece.
El cantante, exlíder de la mítica banda Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, deslindó de responsabilidad a la productora y relató cómo desde el escenario trató de llamar a la calma al ver peleas e incidentes entre el público.
Desde la Municipalidad de Olavarría, sin embargo, insisten en que quienes debían supervisar lo que ocurría dentro del predio “La Colmena”, donde tuvo lugar el concierto, es la productora.
Con ellos coincide Sobrino, quien este martes apuntó que “las responsabilidades del organizador de cualquier evento son claras”.