Los responsables del evento informaron a través de un comunicado que la actuación de Steinfeld, la primera de la jornada en el escenario principal, pasa de las 18:00 hora local (17.00 GMT) a las 16:30. La brasileña Sangalo actuará a continuación, alrededor de las 17:45 (16:45 GMT), para acabar justo a tiempo y no coincidir con el partido, que arranca una hora y cuarto más tarde.
Los dos conciertos principales de Jessie J y Katy Perry no se verían afectados y mantienen las horas de inicio previstas en un primer momento a las 21:15 (20:15 GMT) y 23:00 (22:00 GMT), respectivamente.
Por su parte, la actuación del angoleño Paulo Sousa es la única de los escenarios secundarios que se tendrá que modificar, por lo que empezará a las 18:15 (17:15 GMT) en vez de a las 19:00 (18:00 GMT).
La organización, que no especificó qué sucedería en caso de que el partido llegase a una posible prórroga o incluso tanda de penaltis, también explicó que cerrará sus puertas a las 03:00 (2:00 GMT) horas, una hora más tarde que en las tres primeras jornadas.
Steinfeld, Sangalo y Sousa son los únicos artistas afectados por la decisión de la organización de suspender momentáneamente la programación de la cuarta y última jornada del Rock in Rio Lisboa 2018 para no coincidir con el Uruguay-Portugal.
Los conciertos y actividades paralelas serán sustituidos por la retransmisión del encuentro, que se podrá ver en directo en todas las pantallas habilitadas en el Parque da Bela Vista, sede del evento.
La decisión de adelantar las actuaciones antes de las 19:00 (18:00 GMT) servirá para mantener el horario de cierre del escenario principal a las 00:30 horas (23:30 GMT) y así facilitar la marcha de los asistentes, especialmente en metro, que durante el festival opera hasta las 03:00 (2:00 GMT).
El Rock in Rio Lisboa 2018 celebró dos de sus primeras cuatro jornadas el pasado fin de semana, en las que recibieron un total de 156.000 visitantes. El festival arrancó con una asistencia de 71.000 personas y los conciertos de Muse, Bastille, Haim y Diogo Piçarra; mientras que el segundo día, con Bruno Mars y Demi Lovato como grandes cabezas de cartel; agotó las 85.000 entradas que se pusieron a la venta.