Los medios religiosos no han visto bien su elección de Like a Virgin, de Madonna, para su debut discográfico.
A los primeros que no ha gustado la decisión de sor Cristina de cantar la canción de Madonna, ha sido a la agencia SIR, que pertenece a la Conferencia Episcopal italiana y que dedicó a la joven monja ursulina una nota por lo que calificaba de “operación comercial osada y oportunista”.
La agencia de los obispos italianos asegura incluso que nadie habría oído hablar del disco de la monja si no hubiese elegido como primer sencillo una canción de Madonna.
“Y encima se dice que la canta como una oración, más que una pieza pop. ¡Qué ingenuidad!”, añade la agencia, que se dice además no convencida de su futuro, especifica, “como cantante pop”.
También se ha ocupado de la elección de Like a Virgin el semanal católico Famiglia Cristiana, uno de los que tienen mayor tirada en Italia, que en un artículo firmado por el director del coro de la Catedral de Milán, Claudio Burgio, observa: “Esperemos que no le llegue el divismo”.
La religiosa ursulina asegura que fue ella quien eligió la canción, que interpreta en el vídeo también en Venecia como hizo Madonna, “sin intenciones de provocar o escandalizar”. Según sor Cristina Scuccia, “leyendo el texto se descubre que es una canción sobre la capacidad de amor y de hacer nuevas a las personas”.
El álbum de la monja, que triunfó en las redes sociales con su prueba de acceso a La Voz cantando No one de Alicia Keys, se publicará el 11 de noviembre y ha sido grabado en varios estudios de Los Ángeles. La monja, que fue la ganadora de esta segunda edición del programa, cantó durante su emisión La copa de la vida junto a Ricky Martin y Can't Get You Out of My Head a dúo con Kylie Minogue.