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Camila Flecha recuerda ver videos de ella de niña, en el jardín de infantes, bailando libremente y siendo feliz. “Esta nena se siente totalmente cómoda en un escenario”, es lo que le decía su mamá a su papá en aquella época. Habiendo completado sus estudios de danza y respondiendo al llamado siempre del ritmo, aunque su historia haya tenido un pequeño gran giro, hoy ella es una DJs con una de las carreras más sólidas en el país.
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“A los 15 ví una consola en una fiesta de colegio y me causó muchísima intriga toda esa cantidad de botones”, rememoró sobre la conquista. Junto a un compañero se animó a estudiar, en algo que en ese tiempo para todos era considerado aún como un pasatiempo. Un día un amigo estaba organizando un evento. Era un lanzamiento de una cartera, y le pidió a Cami que vaya a tocar. “Ese fue el primer show que tuve y desde ahí nunca más paré. Después me empezaron a llamar de todos lados y renuncié a mi trabajo para dedicarme a esto”, dijo.
Hoy ella tiene 27 años y recuerda que llegó incluso a empezar a mezclar en la época de los discos compactos, para luego iniciar las mezclas con archivos guardados en pendrive. Desde cómo conectar y desconectar cables, saber para qué sirve cada uno, montar y desmontar la consola, todo eso pasó por sus estudios al comienzo, haciendo de ella una DJ todoterreno y preparada para lo que sea.
“Yo creo que siempre me consideré un poco caradura”, señaló entre risas, porque dijo con honestidad que quizás “tenía limitaciones a la hora de bailar, me costaba, pero tanto me sentía cómoda bailando, tanto me enamoré de la música, del bailar, del sentir, del arte, que te juro que a mí no me paraba nadie, yo tenía una disciplina muy grande dentro del baile. Siempre encontraba la manera de estar metida en el escenario. Mi maestra de baile Alex Martínez me enseñó que con pasión y compromiso uno llega lejos. Ese ideal me llevó a animarme a esto”, afirmó.
Sonido y profesionalización
“Al principio no tenía muy claro que me iba a dedicar a esto y que era la carrera de mi vida. Fue de caradura decir: sí, yo soy DJ. Empecé así tocando deephouse y house, pero me fui encontrando en otros estilos musicales con el correr del tiempo. Y no fue hasta que mi papá, a quien le costaba entender que era un trabajo, me sentó y me dijo este va a ser tu trabajo, ahí todo hizo click”, relató Flecha.
En medio ya de muchos trabajos, yendo y viniendo a las fiestas, Cami se dio cuenta que necesitaba un orden y no podía ella misma seguir siendo quien acarreara los equipos, hiciera las conexiones y luego se dedicara a tocar. En pleno ajetreo conoce a Xenia Kent y Nicole Ayala, que hoy son sus dos managers. “Les dije: yo me quiero dedicar a esto hasta que la vida me diga basta, pero necesito ayuda. Yo no tenía problema de hacer todo porque tenía cancha, pero llegaba un punto en que me olvidaba de manejar todo y ser DJ era la última prioridad en la lista de cosas que tenía para hacer”, señaló.
Así, entre trabajo y trabajo, también siguió dedicándose a formarse, como hace unos años que pudo ser parte del curso Music Business en la ciudad de Los Ángeles. “Es que para mí todo esto es una aventura siempre, el encontrarle la vuelta a las cosas y por sobre todo creo que es conectar a través de las energías. Si vos no estás para arriba nadie te compra ni te la cree, tenés que entrar con toda la energía siempre”, dijo.
En ese sentido, dijo que hoy en día uno de los principales desafíos es entender y conquistar a la juventud. “Para mí es un deasafío gigante, porque siento que es una generación de mucha ansiedad. Los chicos de 15, 16, consumen demasiada información en demasiado poco tiempo. Me incluyo, pero con la diferencia que cuando tenía la edad de ellos yo quería escuchar la canción desde el comienzo hasta el final. Ahora solamente quieren escuchar la parte que sale en TikTok, el fragmento de dos compases que pegó, después quieren otra cosa. Es un desafío súper grande entretenerle a la juventud hoy en día con canciones. Ahí entra un poco la imaginación y creatividad de cada uno”, planteó.
Asimismo, explicó que con lo que desarrolla: “no es que pongo play y ya está todo hecho, hay un trabajo de horas detrás en la computadora, desde una lista de canciones por carpetas, pero al final el trabajo es buscar en vivo las cosas, voy leyendo lo que pasa en el público y en base a lo que veo armo el set en vivo”, explicó.
Un nuevo capítulo
Casi sin esperar, en medio de todo esto, también nace el disco. “Flecha Guaraní” nace de las ganas de que nuestra juventud, incluyéndome, tengamos más cercanía con nuestras raíces”, consideró. Flecha comentó que era una tendencia el “techengue”, que es “como poner una canción de antes con una base de house, desde música de los Bee Gees hasta Luis Miguel, y dije: este es el momento para hacerlo con nuestro folclore”.
Un día pasó en plena fiesta un estribillo de la canción “Paraguaya linda”. “La gente enloqueció”, recordó Camila. Desde ahí empezó a estudiar, investigar, a conectarse con otros artistas, así conoció a Luigi Manzoni, quien produjo el disco junto a ella, y llamó a Sabb Montes, Ricardo Flecha y Melissa Hicks, para ser parte de este álbum. “Luigi al toque entendió lo que estaba buscando. Hicimos un tema, con él surgió el hecho de seguir haciendo temas, hasta que me dí cuenta que teníamos un álbum”, relató con emoción.
Cami recordó cómo aprendimos muchas de estas canciones en el colegio, motivo por el cual “tenemos impregnado ese conocimiento en la cabeza, por lo que esto es un despertar de ese momento de tu niñez, de darnos cuenta de que es cool también escuchar esto, porque son canciones hermosas, tan nuestras”, remarcó.
“Entonces la idea del proyecto era eso y también el poder unir generaciones. Cuando le mostré ‘Paraguaya linda’ a mi abuela no podía creer. Ahí hay una conexión inevitable. Y yo no estoy reversionando ni la guarania, ni la polca, yo te estoy llevando a verlo desde otro punto de vista, creo que eso es el disco”, pensó, además de explicar que “Flecha guaraní” viene de su apellido y de una flecha en sí. “El único momento en que la flecha va para atrás es para tomar impulso, hay que fijar un norte e ir para adelante. Y era eso, volver atrás, agarrar estas canciones y fijar un nuevo camino e ir para adelante con eso y disfrutar”, puntualizó.
De igual forma, Cami añadió: “Pensé que me iban a criticar, porque era delicado. Pero tomé todas las precauciones, fue un disco súper cuidado, respetamos todo, desde lo legal hasta lo musical” y lo que terminó pasando “fue hermoso y fue mucho más de lo que esperaba”, dijo.
La artista, en medio de la emoción, adelantó que ya está trabajando en una edición “deluxe” del disco con más canciones. “Que la gente haya recibido esto con tanto amor fue lo más lindo de mi año, porque realmente la gente se acercó, me escribió, dejaron comentarios en YouTube y todos son positivos, y al tocar en boliches explota”, mencionó.
Pero reconoció que gracias al a confianza que se tenía, tuvo seguridad para avanzar con el proyecto. “Tenía demasiada fé. Iba a ser un cambio en mí como profesional, en mi carrera, en mi manera de ver a la música, porque es la primera vez que saco un material con mi nombre puesto ahí. Siento que la música me regaló demasiado”, dijo Cami, mientras espera un 2025 llena de shows y nuevas canciones.