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“Cada libro que se abre es una puerta a un nuevo mundo, es un pasaporte a lugares inimaginables, enriquece nuestra mente, libera de la esclavitud y la ignorancia. Son nuestros aliados silenciosos, esperando revelarnos secretos y maravillas”, expresaron desde la Biblioteca Municipal en un comunicado sobre este aniversario.
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El histórico lugar, dirigido hoy por el escritor Jacobo Rauskin, destaca con el texto “la importancia de la palabra escrita que adquiere relevancia en el redescubrimiento del hombre a través del vasto universo del conocimiento, y todo aquello que hace a su ser, como sus costumbres y tradiciones, ansias, anhelos y aspiraciones que hermanan y unen a todos los continentes del mundo”.
“En tal sentido, esta institución identificada con la necesidad del saber ciudadano, erigida en pleno corazón de la ciudad, como faro de la cultura, identidad y memoria, cumple plenamente con su cometido, la de convertirse en una puerta de entrada al mundo del conocimiento, a través de la lectura, investigación y recreación. Su sala de lectura con anaqueles llenos de libros de las más diversas temáticas, están al alcance de niños, jóvenes, personas mayores y estudiantes en general, que acuden a diario”, destaca.
“Leer un libro es una aventura del espíritu humano, es adentrarse en las fuentes de la emoción humana, que es patrimonio de todos. Por tanto, las bibliotecas públicas adquieren vital importancia en estos tiempos de la globalización, pues son la herramienta más eficaz para erradicar y vencer las tinieblas de la ignorancia y el analfabetismo a través de la lectura”, añade el texto.
“Es motivo de orgullo y satisfacción la celebración de los 80 años de la creación de la Biblioteca Pública Municipal, que lleva hoy el nombre del insigne Premio Cervantes y laureado escritor compatriota, Augusto Roa Bastos. Su amplia sala de lectura multifuncional recibe a diario a los numerosos usuarios, cumpliendo así su noble propósito de ser fuente de conocimiento y de divulgación”, define.
Ubicada en la Casa Vertúa, la Biblioteca Municipal tiene un acervo de aproximadamente 40.000 volúmenes; cuenta con dos salas de lectura, pupitres individuales (rescatados del Teatro Municipal y que fueran utilizados en la primera Constituyente) y personal capacitado para atención al público y catalogación de los libros. Asimismo, tiene una sala destinada a literatura paraguaya, llamada “Alfredo Seiferheld”, y una hemeroteca, sitio para lectura actualizada y rápida sobre diversos aspectos del arte y la cultura de diferentes países del mundo.
La Biblioteca Municipal posee un interesante y variado Programa de Extensión Biblioteca que abarca varias áreas en función al libro y la lectura, entre los que se resaltan, presentaciones de obras de autores nacionales y extranjeros, conferencias, paneles debates, tertulias literarias y otras actividades del quehacer intelectual.