Cargando...
Air Supply es el grupo de música en inglés que más veces ha visitado Paraguay. Anoche, en el court central del Yacht y Golf Club Paraguayo, Graham Russell y Russell Hitchcock tuvieron su sexto encuentro con el público local que, a pesar de la barrera idiomática, disfruta y celebra sus canciones que han logrado trascender a varias generaciones.
Lea más: Keane en Kilkfest 2024: cuándo empieza la preventa de entradas y cuánto cuesta cada sector
Puntualmente a las 22:00, los Air Supply hicieron su aparición en escena acompañados de cuatro músicos y una escenografía sencilla, con las luces creando los distintos ambientes. “Sweet Dreams” abrió el repertorio, con Russell pidiendo sutilmente un poco más de retorno y Graham cautivando con un solo de guitarra.
Pero con la segunda canción, la animada “Even the Nights Are Better”, la gente comenzó a entrar en ritmo y a acompañar con las palmas, coreando esta canción. “Just as I Am” le siguió en el repertorio, con el público aún entrando más en ambiente y celebrando cada gesto de saludo de los artistas.
“Every Woman in the World”, otro de los grandes hits del dúo australiano, resonó en la calurosa noche junto al río y antecedió al primer saludo. “Hagan un poco de ruido”, les pidió Russell a los del sector VIP, para luego afirmar que estaban complacidos por volver.
“No tomamos nada por sentado, así que agradecemos mucho poder verlos esta noche”, agregó el cantante que, a pesar de los años, mantiene su voz en un muy buen nivel.
“Here I Am”, una balada que habla acerca de las dificultades para olvidar un viejo amor, también fue interpretada por el dúo. “Buenas noches Paraguay. Yo soy el otro”, saludó Graham en español y agregó: “Esta noche son de nosotros y nosotros somos de ustedes”, en medio de los aplausos y ovaciones.
Tras interpretar “Chances”, Graham cambió de guitarra y dio paso a otro de los grandes éxitos del grupo, que fue muy celebrado y coreado por el público: “Goodbye”. La química entre ambos artistas en escena es innegable y constantemente van de un lado al otro saludando y buscando conectar con la gente.
Y en esta conexión con el público, fue Graham Russell el que generó una mayor interacción cuando su compañero bajó del escenario para una breve pausa. Allí el compositor, guitarrista y cantante afirmó “el show no ha terminado, ni ha comenzado. Russell se va un rato a tomar el té”, expresó.
Un poema para Paraguay
Y luego ofreció un momento que, en sus propias palabras, “es algo inusual para una banda de rock”. Siempre lee un poema pero, según afirmó, en esta gira por Sudamérica está presentando versos que escribió ese mismo día en cada país. Su poesía dedicada al Paraguay se tituló “Distant parakeet”, que en español sería “una cotorrita a lo lejos”.
Claramente el artista se inspiró en el paisaje natural que le ofreció el hotel ubicado a orillas del Río Paraguay y afirmó que más allá del fuego del sol, había otro que se estaba iniciando con el rasguido de guitarras. “Juntos vamos a reír y a llorar, por siempre en Paraguay”, cerró diciendo el poema en medio de los aplausos y la ovación del público.
Graham también les preguntó a los de la primera fila acerca del champagne que estaban bebiendo y luego comentó acerca de la gran amistad que tienen con Russell, desde que se conocieron en el año 1975. “Muchos de ustedes ni habían nacido”, expresó.
Y afirmando que en estos casi 50 años nunca tuvieron una pelea, recibió nuevamente en el escenario a su “mejor amigo” Russell Hitchcock. El cantante, por su parte, comentó acerca de los inicios del grupo, sus primeras giras por Australia y Estados Unidos. De esta manera dio paso a una de las primeras canciones de Air Supply, “Two Less Lonely People”.
Con una guitarra acústica, Graham ofreció otro memorable momento del show. Un solo con golpecitos constantes en las cuerdas y la caja, haciendo relucir sus habilidades con este instrumento. El que tampoco se quedó atrás con los solos, pero en la guitarra eléctrica, fue el guitarrista y director musical de la banda Aaron McLain.
“The One That You Love” vino con una invitación para que el público cante el final, así como “Lost in Love”. Un tremendo solo de batería a cargo de Pavel Valdman, que el público acompañó con las palmas, se pudo escuchar antes de otro de los grandes clásicos de Air Supply: “Making Love Out of Nothing at All”, en medio de la emoción de la gente que estaba ávida de más.
Con animados aplausos, la banda volvió al escenario para el tramo final del show y fue al compás de la emblemática balada “Without You”.
Los integrantes de Air Supply se tomaron luego el tiempo para presentar y agradecer a cada uno de los integrantes de su “pequeña familia de gira”. Entre esos estaban el bajista Doug Gild, el pianista Mirko Tessandori, y Mark “Sparky” Sweatt, el tour manager que los acompaña desde hace 32 años.
El cierre llegó con “All Out of Love” y el público espontáneamente encendió las linternas de sus celulares. Y en medio de la emoción, otras luces se comenzaron a encender en el cielo y un show de drones luminosos se observó por primera vez en nuestro país generando una guitarra, luego Air Supply, también apareció la palabra “Thanks” (Gracias) y cerró con una bandera paraguaya.
La banda se despidió del público paraguayo con “All you need is love” sonando en los parlantes, mientras saludaban y regalaban púas a la gente. Air Supply ofreció un show de gran calidad musical, respaldado no solo por grandes éxitos sino también por los arreglos y la técnica interpretativa de la banda de soporte, además del carisma y talento de sus líderes.
La apertura del show estuvo a cargo de la guitarrista paraguaya Loida Liuzzi, quien desplegó su talento en escena interpretando en su guitarra eléctrica el himno de “Top Gun”, el tango “Por una cabeza” y “Caruso”, acompañada por bases grabadas. Cerrando su show, en el que se mostró emocionada por tocar ante el público paraguayo, presentó su sencillo “Mediterráneo”, inspirado en el sitio donde se da la conjunción entre dicho mar y el océano Atlántico.