La disputa legal sobre la millonaria herencia de la cantante estadounidense (1942-2018) llegó a juicio el lunes en el condado de Oakland (Míchigan) y este martes fue anunciada la deliberación.
"Estoy muy feliz. Han sido unos cinco años muy largos y ahora podemos tener un respiro. Es algo muy bueno", dijo el hijo menor de la cantante de "At Last", Kecalf Franklin, a la cadena estadounidense Fox.
Franklin murió de cáncer de páncreas en agosto de 2018 y entonces se creía que la artista no había preparado un testamento. Meses más tarde, en mayo de 2019, fueron encontrados dos juegos de documentos escritos a mano en la casa de la cantante ubicada en la ciudad de Detroit.
Uno de los escritos, oculto bajo los cojines de un sofá, estaba fechado en 2014 y el otro, que estaba dentro de un armario, había sido redactado en 2010.
Tres de los cuatro hijos de la "Reina del Soul" llevaban años batallando sobre la validez de ambos testamentos manuscritos.
Los abogados de Kecalf y Edward Franklin habían argumentado que los papeles fechados en 2014 deberían anular el testamento de 2010, cuya versión era apoyada por su hijo Ted White II.
El testamento de 2010 colocaba a White como el administrador de su patrimonio y exigía a sus otros dos hijos obtener un certificado o diploma en negocios antes de acceder a la herencia.
Sin embargo, el texto de 2014 eliminaba el requisito de esa formación y colocaba a Kecalf como administrador de la fortuna y heredero de la mansión a las afueras de Detroit.
Su otro hijo, el mayor, Clarence Franklin, no participó en el juicio ya que sufre de una enfermedad mental, pero ambos testamentos señalaban que la herencia debía poder sostenerlo financieramente.
La herencia incluye prendas de lujo, joyas, inmuebles y derechos de autor y se estima que está valorada en unos 18 millones de dólares (16,4 millones de euros al cambio de hoy).
Sin embargo, la cantidad final se verá reducida por un acuerdo con la Hacienda de Estados Unidos para resolver el impago de más de 8 millones de dólares en impuestos, a través de un porcentaje de las regalías de la música de Franklin.