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Ante un par de grandes festivales previstos y cancelados, la gente estaba entre expectante y emocionada porque por fin pueda desarrollarse este ReciclArte que en su cartel proponía una cantidad de bandas tocando desde el mediodía del sábado 10 y el domingo 11 de setiembre.
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Este festival que tiene como característica promover principalmente el rock latinoamericano en sus diversas vertientes, apostó esta vez por agrupaciones nacionales e internacionales con diferentes trayectorias.
El protagonismo de los nacionales
Algo que se ha constatado ya con otros festivales pero con más énfasis en este es la aceptación que tiene la música de bandas paraguayas, sobre todo las que se presentaron ante un público numeroso.
Algunos ejemplos, y además eclécticos, como Purahéi Soul, Kchiporros, LaNuestra, Altamirano, Nhandei Zha, Villagrán Bolaños, Antenna, Néstor Ló y Los Caminantes, Flou, demostraron que sus canciones son del gusto popular, ya que la gente corea y celebra sus temas de principio a fin.
En este punto se destaca también la calidad de cada propuesta musical y la performance en escena de cada uno en su estilo, que nada tienen que envidiar a las bandas de afuera. Asimismo, se nota la preocupación y el cuidado por la propuesta escénica, ya sea desde las visuales, los vestuarios y en algunos casos hasta maquillaje.
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La variedad de lo nuevo (para algunos) en el día uno
En el escenario Pilsen Extra, uno más pequeño, el día uno se han presentado varias propuestas de Argentina. Bandas como 1915, Gauchito Club, Silvestre y La Naranja, Conociendo Rusia, la cantante Zoe Gotusso (todas en calidad de debut en nuestro país) y el dúo de Ca7riel y Paco Amoroso (que ya vino en ocasiones anteriores), han traído frescura y fuerza con condimentos como el pop, el indie rock, el funk, el trap, en interesantes fusiones con otros estilos y demostrando ser excelentes músicos todos.
Estos grupos que forman parte de una nueva ola de música argentina, si bien aquí aún no son masivos, demostraron que tienen un interesante número de seguidores pues cada uno actuó ante un público que conocía sus canciones. Definitivamente es una escena para tener en cuenta.
La nostalgia de la segunda jornada
Con bandas como Moon Ska Monkeys, Krhizya, Vecindad Autopsia, Ripe Banana Skins, Gaia y Deliverans, la nostalgia se hizo presente en la segunda jornada del festival. De hecho la primera citada volvió este año para un concierto luego de mucho tiempo de dejar de tocar, al igual que Krhizya, que marcó además el reencuentro de Rolando Chaparro con un gran escenario.
La excusa perfecta para compartir
Un festival de esta envergadura facilita la generación de conexiones y de momentos únicos. El compartir entre artistas nacionales e internacionales fue algo que sucedió con varias bandas.
Desde la invitación de la banda uruguaya La Vela Puerca y la local Evas a la pequeña baterista Emma Sofía, Rolando Chaparro tocando con 2 Minutos, Ripe Banana Skins invitando a músicos de The Tempranos, Kchiporros compartiendo escenario con Purahéi Soul y los Kamba Cuá, el “Mono” de Kapanga subiendo junto a los Catupecu Machu, Moon Ska Monkeys cantando con Amado Sarabia de Square Pants, son algunos de los ejemplos que solo pueden suceder en momentos como este.
Bandas con trayectoria que siguen emocionando
Desde la calidez de La Vela Puerca y Las Pastillas del Abuelo, pasando por el rock comprometido de Aterciopelados, la energía pegadiza de Turf, Bersuit Vergarabat y Kapanga, la intensidad del punk de 2 Minutos y Flema, y el emotivo cierre de Catupecu Machu con su show a dos baterías, estas bandas demostraron que siguen vigentes y sus canciones han marcado a varias generaciones.
Lo que se puede mejorar
Lastimosamente la agenda del festival fue muy extensa, con más de doce horas de duración por jornada. Fue una pena que grupos como Evas, Porlobajo & Sofi Barudi, Band’Elaschica, Tribu Sónica, con una marcada presencia femenina; o Lado 20 y La Murga, que se han presentado gracias a un intercambio con la provincia argentina de Corrientes, tocaron frente a casi nadie de público.
De nada sirve incluir a una banda en la programación, si al final va a terminar tocando frente a un par de personas. Justamente, la idea de estos cupos o intercambios es la de dar visibilidad a estos artistas frente al público que acude al festival.
Otro aspecto que debería tener en cuenta la organización para próximas ediciones, es la de montar una sala de prensa que permita tener conexión a internet y enchufes para la carga de teléfonos celulares, computadoras, baterías de cámaras, etc. Casilleros y un poco de agua también serán bienvenidos.