“Similar a la obsesión durante décadas de Donald Trump con respecto a su valor neto, los medios a los que han recurrido los Jenner -incluyendo invitaciones a Forbes para visitar sus mansiones o a las oficinas de los contables públicos, o incluso creando declaraciones de la renta probablemente falsificadas- revela cómo de desesperados están algunos de los ultraricos para parecer aun más ricos”, dice un artículo de Forbes publicado este viernes.
El artículo asegura que basándose en “nueva información” obtenida, además del impacto que ha tenido la pandemia del coronavirus sobre el precio de las acciones de la empresa y los gastos del consumidor, Kylie Jenner ya no tiene los más de 1.000 millones de dólares que se necesitan para ser considerada una “billonaria” por Forbes.
En mayo de 2015, Jenner lanzó con unos 250.000 dólares una exitosa línea de labiales aprovechando la polémica que habían levantado sus operaciones de estética entre los más jóvenes, y para 2016 contaba con decenas de productos.
Poco después, señala el texto, las Kardashian comenzaron una intensa campaña para colocar a Kylie en una de las portadas de Forbes, asegurando que la empresa de la joven, de entonces 19 años, había acumulado 300 millones de dólares en ingresos en solo un año, algo “difícil de creer”, según dijeron varios expertos que consultó en ese momento la revista.
Por eso, y para frustración de los Kardashian, Forbes la situó en 2017 en el puesto 59 de celebridades con mayor fortuna tras calcular que había ingresado unos 41 millones de dólares.
Pero después, dicen, otras publicaciones, como la revista de moda WWD, o los medios especialistas en economía Fortune o CNBC, sí que dieron como válida la cifra de los 300 millones de los Kardashian, sumando otros 180 millones de 6 meses más.
Así, la opinión de los expertos cambió con el paso del tiempo, y la cifra de 330 millones en ganancias en 2017 pasaron a ser “creíbles”, por lo que se le dio a Kylie Jenner un valor estimado de 900 millones de dólares a los 20 años.
Cualquier duda de que había superado los 1.000 millones de dólares pareció disiparse en noviembre de 2019, cuando el gigante de cosméticos Coty anunció que compraba un 51 % de Kylie Cosmetics por 600 millones de dólares, situando el valor de la empresa en 1.200 millones.
Sin embargo, cuando pasó a manos de Coty, esta compañía empezó a informar de beneficios de 177 millones al año, muy por debajo de los 300 millones que los Kardashian habían estado asegurando anteriormente.
La reducción de beneficios, que cayó un 62 % entre 2016 y 2018, es demasiado pronunciada para ser real, según los expertos consultados por Forbes.
Lo más probable, señala el artículo, es que “el negocio nunca fue tan grande para empezar, y los Jenners han estado mintiendo sobre ello desde 2016, incluyendo haber llevado a que su contable presentara números falsos en la declaración de la renta. (...) Aunque no podemos probar que esos documentos sean falsos (aunque es probable), lo claro es que la gente de Kylie ha estado mintiendo”.
La reacción de la empresaria e influencer no se ha hecho esperar: “Pensaba que esta era una página web con buena reputación”, dijo este viernes en las redes sociales en referencia a Forbes.
“Todo lo que veo son afirmaciones inexactas y suposiciones que no han sido probadas. Nunca he pedido ningún título ni he mentido para conseguirlo. NUNCA. Y punto”, aseveró.