La famosa autora apuntó, en unas declaraciones publicadas en el último número de la revista Radio Times, que utilizar “el pseudónimo era una manera de desconectar” con ella misma y “con todo lo que tiene detrás” como escritora.
“Siendo J.K Rowling se tienen muchos privilegios, así que esto no es una queja ni en lo más mínimo”, añadió. El personaje de Galbraith aparece por primera vez en The Cuckoo's Calling (El canto del cuco), que salió a la venta en 2013 y reportó numerosos elogios de la crítica, siendo uno de los libros más vendidos del año.
Ahora, la cadena pública británica BBC ha adaptado la novela policíaca para la televisión y sus personajes son protagonizados por los actores Tom Burker y Holliday Grainger. Después de The Cuckoo's Calling, le seguirán las adaptaciones de The Silkworm (El gusano de seda) y Career Of Evil (El oficio del mal), también libros escritos bajo el mismo pseudónimo.
J.K Rowling dijo que quería empezar a escribir sobre el género, nuevo para ella, “sin expectativas” por ser quien era. “Quería que se tratara simplemente de escritura, no estaba tratando de engañar a nadie, y esperaba poder sacar tres libros como Robert antes de que nadie lo supiera”, sostuvo Rowling.
Este drama policíaco ha sido un reto para los productores pues han tenido “mucho cuidado” al filmar las escenas de violencia contra las mujeres. La productora ejecutiva de la serie, Ruth Kenley-Letts, señaló que ella misma ha sido incapaz de ver muchos de los espectáculos de violencia contra las mujeres que se muestran en televisión, por lo que ha intentando “ser muy cuidadosa” con respecto a este tema.
El primer episodio de la serie, The Cuckoo's Calling, se estrena el próximo domingo 27 de agosto.