OVO: Una explosión de colores

Hormigas, libélulas, luciérnagas, arañas, mariposas, escarabajos, y muchas otras especies de insectos se reúnen en el colorido universo de “Ovo”, tercer show del Cirque du Soleil que llegará a nuestro país desde el 31 de mayo en SND Arena.

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La vestuarista española Mar González Fernández habló en exclusiva con ABC Color sobre el trabajo que realiza con su equipo. 

Mar González Fernández es la jefa de vestuario de “Ovo”. Ella viaja por el mundo con este espectáculo que nos muestra a una enérgica y divertida colonia de insectos, donde un día aparece un misterioso huevo, despertando la curiosidad de los habitantes. 

“Para nuestro show la idea original empieza en el mundo de los bocetos”, dijo Mar, para añadir que la apariencia de cada personaje nace por la creatividad de la diseñadora canadiense Liz Vandal, quien realiza los diseños “de una manera mucho más estilizada, moderna y alegre para el espectáculo”. Entonces desde ese primer concepto, Vandal “hace una evolución, bastante especial y muy buena, hasta los trajes que tenemos”. Esa evolución, señaló Mar, “siempre tiene que tener en cuenta la comodidad y la seguridad de los artistas, a la hora de hacer todas las siluetas”. 

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Algo fundamental es justamente que cada vestuario se adapte a las necesidades de los artistas, entre los cuales hay clowns, atletas y acróbatas. “Cada artista requiere una movilidad, porque ellos saltan, hacen contorsiones, entonces la creatividad del diseñador tiene que reflejar la necesidad real del artista”. Entonces a la hora de la realización el traje debe ser “práctico y bonito pero a la vez realista y seguro”. 

En dicho sentido, los trajes son realizados también enteramente en Canadá, en los estudios centrales del Cirque du Soleil. Entre el diseño y la confección, se tardó varios meses, apuntó la vestuarista. Agregó que “los trajes tienen una vida, dependiendo de su uso, a veces de tres meses a un año”, por lo que están constantemente renovando. 

“Una de las mejores partes del vestuario del Cirque du Soleil es que todos los tejidos son especiales y hechos en nuestras oficinas centrales. Todos los tejidos son teñidos y cosidos allí, y todos los tratamientos son hechos allí, entonces todas las cosas son especiales para cada show”, destacó. 

El trabajo de Mar y su equipo es con el día a día del Cirque du Soleil de gira, ya que ella más tres personas de la compañía y dos que se contratan en cada país al que llegan, tienen el desafío de preparar el vestuario para los cerca de cincuenta artistas que conforman el elenco. “El volumen de trabajo es bastante grande. Hay un número de casi 1.600 piezas y entonces cada semana tenemos que lavar, arreglar, coser, y eso es muchísimo trabajo”. 

Su departamento también se hace cargo de los accesorios, como pelucas, sombreros, zapatos, cinturones y máscaras, como también son responsables del maquillaje. 

Durante el desarrollo del show, una persona de su equipo está posicionada en el backstage, cerca de los artistas por cualquier emergencia. “Siempre puedes esperar lo peor, siempre se puede romper algo en el último momento incluso, aunque nosotros tenemos mucho cuidado de ver todas las cosas todo a tiempo, pero por supuesto siempre algún imprevisto de última hora y tenemos que estar ahí preparadas”, enfatizó González. 

“La verdad que es una locura el trabajo porque nosotros estamos siempre viajando, moviéndonos, y bueno algunas veces tienes que recordarte a ti mismo porqué lo haces, porque estás lejos de tu familia, de tus amigos y es bastante duro. Montar todo, desmontar, llevarte todos los trajes a otro lado y empezar otra vez, la verdad que tiene una parte dura también”, reflexionó también la vestuarista acerca del reto que representa un trabajo como el que realiza.

Mar González Fernández, quien también ya estuvo encargada del vestuario de varios shows del Cirque du Soleil como “Quidam”, “Zaia”, “Alegría”, “Varekai”, consideró que “Ovo” es uno de los espectáculos más enfocados en el disfrute de la familia entera. Ya sea “por los colores, los payasos y todos los insectos, es algo que los niños realmente aprecian, y cuando los ves reír por ejemplo con los grillos o las hormigas, realmente es muy bonito de ver”, expresó. 

“Es un espectáculo que vale la pena, yo lo recomendaría a todo el mundo que lo viera porque es divertido, es muy colorido, tiene unos trajes muy bonitos, mucha energía, realmente las acrobacias son increíbles, y la música tiene un origen muy brasileño, muy sudamericano y muy alegre. Creo que todo el mundo va a disfrutar”, concluyó.

victoria.martinez@abc.com.py

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