La pandemia puso en evidencia la necesidad de un registro nacional de trabajadores de la cultura

En medio del periodo gubernativo que se va aconteció la pandemia y todo lo que este suceso trajo como consecuencia. El efecto más grave fue que esto dejó sin escenario a artistas de todos los ámbitos, lo cual siempre representó la mayor fuente de ingresos para músicos, actores, bailarines, y todos los que forman parte de una producción.

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Esto desnudó más que nunca el estado desprotegido y sin garantías con que trabaja el sector cultural al no existir leyes que avalen al menos la posibilidad de contar con un seguro social.

Como algo formal que se generó a partir de esta situación fue la habilitación de Téra, promovido por la Secretaría Nacional de Cultura (SNC).

Es una plataforma digital que a partir de septiembre de 2020 permitió obtener el registro de artistas, gestores y organizaciones culturales, para el diseño de programas y acciones específicas que favorezcan el desarrollo cultural nacional. También fue un empadronamiento requerido para la Ley 6.584/20, que estableció un subsidio para trabajadores culturales afectados por la pandemia.

Luego del proceso de empadronamiento a través del Téra, la SNC había remitido al Ministerio de Hacienda un listado de 7.087 artistas de todo el país habilitados para acceder al beneficio, según los datos publicados por la entidad. No obstante, en un informe presentado en julio de 2021 por el presidente Mario Abdo Benítez, se conoció que “fueron beneficiados unos 3.000 artistas con tres pagos consecutivos de G. 548.210 por un importe total de más de G. 5.000 millones”. Es decir, solamente el 42% de los que figuraba en dicha lista pudo acceder finalmente al subsidio.

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Al día de hoy Téra sigue habilitado y en actualización constante, pues quienes se encuentren allí inscriptos pueden concursar en las diferentes líneas de ayuda de la SNC, como ser el Programa de Fondos de Cultura para Proyectos Ciudadanos – Concursable, cuya implementación empezó en 2020 también motivada por la pandemia. Llamativamente, este año salió la lista de proyectos seleccionados, más no el monto que llevó cada uno ni el total.

Otra línea lanzada en 2021 fue Puntos de Cultura, programa destinado a fortalecer a organizaciones y colectivos comunitarios a través del apoyo económico y técnico para la realización de proyectos culturales orientados a contrarrestar el impacto de la emergencia sanitaria. El mismo también sigue vigente y este año fueron seleccionados 36 propuestas de todo el país.

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Evolución del Presupuesto de la Secretaría Nacional de Cultura

Este periodo finalizó con el ministro Rubén Capdevila a la cabeza y hasta esta edición sigue sin conocerse el nombre de quién estará al frente de la cartera cultural durante el nuevo gobierno.

Fondo Nacional de la Cultura y las Artes (Fondec)

El Fondec, institución dedicada a promover y financiar actividades culturales privadas en todo el país continuó como todos los años otorgando sus diferentes líneas de apoyo a los sectores de música, artes escénicas, audiovisual, artes plásticas, estudio y análisis sobre la cultura y las artes, literatura, como también becas de estudio y más, entre personas fícias y jurídicas.

Este año, específicamente en la convocatoria de artes audiovisuales, se sumó también el apoyo a proyectos en etapa de desarrollo en convenio interinstitucional con el Instituto Nacional del Audiovisual Paraguayo (INAP), otorgando G. 210.000.000 entre 6 proyectos.

También este año se dembolsaron G. 90.000.000 entre 9 artistas con trayectoria por los 25 años del Fondec. Fueron beneficiados Roger Bernalve, Hedy González Frutos, Lilú Torres, Galia Giménez, Wilma Ferreira, Herma Cáceres Acuña, Benito Medina Benítez, Jorge Brítez y Rosalina Robles.

En mayo de 2022 había asumido el gestor cultural Enrique Escobar como nuevo director ejecutivo de la institución, reemplazando a la exconcejala Myriam Ferreira.

Evolución del Presupuesto del Fondec

¿Cuánto otorgó por año entre proyectos culturales y becas?

El gran desafío de promover la cultura

La emergencia sanitaria causada por la pandemia demostró la necesidad de reconocer al artista como un trabajador más en toda la cadena laboral. Téra ha sido una herramienta fundamental para conocer cuántas personas buscan vivir del trabajo artístico en todo el país. No obstante, debería realizarse un seguimiento para poder cubrir las necesidades de todo el sector que no terminan en el hecho de poder realizar conciertos, películas, obras de teatro u otros eventos. La cultura crece también a partir del estudio, de las investigaciones, del conocimiento, por lo que fortalecer capacitaciones y la circulación de proyectos en la región es imperioso.

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En ese sentido la SNC con sus Fondos Concursables, Puntos de Cultura, y el Fondec con sus líneas de apoyo a proyectos artísticos y becas tienen también el desafío de idenfiticar en cuanto a calidad de propuestas el impacto que estas pueden tener en la sociedad. La cultura es un bien fundamental para que la comunidad pueda razonar, cuestionar y sobre todo educarse. En esa misma línea, la transparencia de criterios de selección y de montos asignados es siempre indispensable a la hora de realizar estos procesos que sirven en el desarrollo de una identidad a través de las creaciones artísticas.

Algo muy cuestionado es también la burocracia a la hora de presentar proyectos, por lo que hacer más sencillos los procesos puede ser también un plus para que más propuestas puedan llegar hasta las diferentes instituciones.