El filme, aún sin título oficial pero que será la octava entrega de ese “thriller” sobre ruedas, recibió luz verde después de que en menos de 20 días Rápidos y Furiosos 7 recaudara en los cines de todo el mundo más de 1.000 millones de dólares y se convirtiera en la producción de Hollywood que más rápido ha alcanzado ese hito.
El éxito de Rápidos y Furiosos 7 estuvo marcado por la tragedia de uno de sus protagonistas, el actor Paul Walker, quien falleció en un accidente de tráfico durante el rodaje y al que se le rinde un homenaje al final de un filme con sabor a despedida.