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El nivel de expectativa que acarrea consigo el inminente estreno de “Iron Man 3” es enorme. Por un lado, lógicamente la perspectiva de volver a ver a Robert Downey Jr. vestido de hierro, combatiendo en una superproducción, es atractiva para millones de personas que han hecho de los dos filmes anteriores de la saga -estrenados en 2008 y 2010- un éxito.
Por otro lado, el primer “Iron Man” marcó el paso inicial en un arriesgado experimento de Marvel para ver si traer la continuidad que caracteriza a los cómics -donde un título específico forma parte de un universo y los acontecimientos en una historia afectan a otra- al mundo del cine. El resultado de ese experimento fue la mundialmente exitosa “Los Vengadores”, que rompió récords de taquilla.
Ahora, con “Iron Man 3” Marvel abre la fase dos de su universo cinematográfico, en el que planea contar nuevas historias individuales de personajes ya presentes en “Los Vengadores” y algunos nuevos nombres.
El elegido para dirigir este filme fue el estadounidense Shane Black, un director de 51 años nacido en Pittsburgh, Pennsylvania, que se hizo de un nombre en la industria del cine como guionista de filmes emblemáticos como “Arma Mortal” y “Depredador”, y luego pasaría a dirigir el thriller de 2005 “Kiss Kiss Bang Bang”, con Robert Downey Jr.
“Con Robert, nunca sabes exactamente qué ocurrirá, pero él siempre parece mejorar el material que le entregas, y eso es precisamente lo mejor que tiene”, dijo Black sobre su estrella en el filme. “Él es esa clase de gente que toma todo muy personal. Es muy apasionado e intenso; no quiere actuar de la misma manera que lo hizo la última vez. Creo que es uno de nuestros grandes actores”.
“Robert llega cada día listo para jugar; te mantiene muy alerta desde la mañana temprano, algo que a mí no me ocurre naturalmente”, añade el director. “Tiene sus ideas y colaboramos mucho, como lo hemos hecho antes. Él es una fuerza de la naturaleza para tener en cuenta. Es un adulto; es un niño; es un genio. Puede ser el tipo más hiperactivo; su energía no tiene límites. Básicamente, es un fenómeno”.
Black se declarón un fan de Iron Man desde pequeño, ya que le atraía el aspecto tecnológico del héroe, algo no muy visto en los cómics de los '60. Pero más allá de lo superficial, encontró fascinante al personaje de Tony Stark en sus aspectos más personales.
“Tony Stark tiene tantos problemas, tantas flaquezas, pero después aprendí a apreciar esos aspectos. Eso lo convierte en un personaje que encaja tan bien con Downey Jr. Una vez que tienes todo, ¿qué es lo que tienes? Te sientas allí, bebiendo champagne, mirando a través de una enorme ventana al resto del mundo, que te pertenece… ¿qué es lo que pasa por tu cabeza en esa situación?”, reflexiona.
Black asegura que el desafío después de un filme de tan amplio alcance como “Los Vengadores”, en los que los aspectos cósmicos de la “mitología” de Marvel entraban en juego en la forma de batallas con extraterrestres, era traer a la historia de vuelta a la Tierra, siempre respetando los acontecimientos de aquella película.
“Creo que tenemos una aterradora amenaza en este film, que es extravagante pero que también es realista comparada con el mundo actual, un entorno de guerras internacionales, armas y terrorismo”, dijo Black.
Se trata de un proyecto enorme, más aún teniendo en cuenta que se trata solo del segundo filme dirigido por Black -quien además se halla considerando otro proyecto de alto perfil, una adaptación hollywoodense del manga “Death Note”-, pero lo encaró conciliando sus sensibilidades de realizador de thrillers con la “grandilocuencia” de los cómics y el realismo de una amenaza como el terrorismo.
Esa amenaza llega encarnada en la figura del Mandarín, un villano clásico de Iron Man interpretado por el legendario Ben Kingsley (“Gandhi”), reimaginado con un origen mucho menos fantasioso que el de su contraparte de las historietas. “Lamento acabar con las expectativas de algunos, pero él no viene del espacio”, dijo Black.
“Iron Man 3” se estrena el viernes 26 de abril en Paraguay y decenas de otros países. El filme cuenta con un elenco que incluye también a Gwyneth Paltrow, Don Cheadle y Jon Favreau -quien dirigió los dos primeros filmes- retornando a sus papeles anteriores, acompañados de rostros nuevos para la saga como Rebecca Hall (“Atracción Peligrosa”) y Guy Pearce, a quien actualmente podemos ver en la cartelera paraguaya en “Los Ilegales”.