Cerca de cumplir 80 años -en septiembre-, Sophia Loren se mostró llena de energía en Cannes, donde es la invitada de honor de la 67 edición en la sección Cannes Classics, con motivo de los 50 años de uno de sus filmes más emblemáticos, Matrimonio all'italiana, de Vittorio de Sica y coprotagonizada por Marcello Mastroianni.
Una película que la actriz tiene “verdaderamente en el corazón”, según afirmó hoy en francés después de que el delegado general de Cannes, Thierry Frémaux, le dijera que podía expresarse en italiano y ser traducida al francés por su hijo Edouardo.
“¿Por qué? Si yo puedo hablar francés”, espetó con genio la actriz, ante las risas del auditorio.
Un genio muy presente en Matrimonio all'italiana, una película que Loren realizó con dos de los hombres más importantes de su carrera cinematográfica, el realizador Vittorio de Sica, con el que colaboró en ocho películas, y Mastroianni, su “gran amor del cine y de la pantalla”.
Loren, deslumbrante con un vestido color champagne adornado con cristales, había sido previamente presentada por Frémaux, que destacó la timidez de la actriz, como quedó demostrado en una cena celebrada ayer.
La actriz estaba sentada y, al darse cuenta se acercaron a saludarla Hilary Swank, Jane Campion y Sofia Coppola, porque ella no había querido que se notara su presencia, relató Frémaux, que dice que después de esos saludos, Loren le dijo: “ahora me siento más a gusto”.
Frémaux calificó además de “regalo inestimable” la presencia de la actriz en Cannes en su regreso al cine tras su participación en Nine (2009).
Y lo hace con un cortometraje que protagoniza a las órdenes de su hijo Edouardo Ponti, Voce Umana, inspirado en una obra de Jean Cocteau del mismo título, con una única actriz en escena.
Una conocida obra que muestra a una mujer en Nápoles en los años cincuenta durante su última conversación telefónica con el hombre que amaba y que le ha dejado por otra.
En el corto, la actriz demuestra que sigue teniendo la fuerza interpretativa que la hizo famosa en una historia que llevaba cuarenta años queriendo interpretar, como explicó su hijo Edouardo.
“Ella me ha dado la vida. He nacido gracias a ella y yo le he dado este pequeño filme”, explicó antes de la proyección.
Tras el cortometraje, la copia restaurada de Matrimonio all'italiana es un certero retrato de la hipocresía de la sociedad italiana de los sesenta.
Sophia Loren interpreta a una prostituta, Filumena Marturano, que es sacada de la calle por un rico napolitano, Domenico Soriano (Mastroianni), que al creer que va a morir pronto, le pide que se case con él.
Una de las interpretaciones más conocidas de una actriz que fue la primera en ganar un Óscar por un papel que no fuera en inglés por La ciociara y que también le valió el premio de interpretación de Cannes de 1961.
Un festival con el que la actriz tiene una larga historia. Además del premio, fue presidenta del jurado de la competición oficial en 1966 y ha presentado ocho películas en diferentes secciones desde 1955.
El homenaje de Cannes a la italiana se cerrará mañana con una clase magistral de la actriz.