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(Esta es una actualización del artículo publicado el 29 de enero de 2013, semanas antes de la edición 85 de los premios de la Academia, en la cual Lawrence se hallaba también nominada a un Óscar)
En 2010, Jennifer Lawrence surgía como una revelación gracias a su rol protagónico en el premiado filme independiente Winter's Bone, que le valió a la joven actriz nada menos que una nominación al Oscar a la Mejor actriz. Un año después ya era una estrella establecida, y para 2012 ya se situaba como una de las actrices más famosas del momento.
Ese año, Lawrence puso el broche de oro a su establecimiento como uno de los rostros más resaltantes del Hollywood contemporáneo alzándose, con apenas 22 años, con su primer premio Óscar, hazaña que busca repetir ahora, un año después.
Jennifer Shrader Lawrence nació en Louisville, Kentucky (Estados Unidos) el 15 de agosto de 1990, hija del empresario de construcción Gary Lawrence y Karen Koch, directora de un campamento de verano para niños.
Lawrence comenzó a actuar en obras locales, y para los 14 años ya había decidido que quería dedicarse profesionalmente a la actuación. Con ese fin se graduó del colegio con dos años de anticipación y logró que sus padres la llevaran a Nueva York para conseguir un agente. Durante este período trabajó con su madre como enfermera asistente en el campamento de niños.
La joven actriz no llegó a estudiar actuación. Su debut profesional se dio en 2007 con la comedia televisiva The Bill Engval Show, interpretando a la hija mayor del protagonista, un consejero familiar con una familia problemática. Aunque la serie sólo duró tres temporadas, bastó para que la actriz comenzara a recibir atención e incluso premios.
Lawrence siguió actuando en televisión con roles ocasionales en series como Cold Case, Monk o Medium, antes de debutar en largometrajes con un pequeño papel en la película Garden Party (2008).
Sin embargo, su primer rol de importancia llegó ese año en la película Fuego, el debut como director del guionista mexicano Guillermo Arriaga, quien escribió los premiados filmes de Alejandro González Iñárritu Amores Perros, 21 Gramos y Babel. En el filme, que cuenta varias historias entrelazadas, Lawrence interpreta a una joven que descubre que su madre tiene un amorío con un hombre casado; sus co-estrellas en la película fueron actrices de la talla de Kim Basinger y Charlize Theron.
Ese mismo año, la actriz filmó Poker House, un drama en el que interpretaba a una de las hermanas menores de una mujer -la actriz Selma Blair- que intenta criarlas y protegerlas viviendo en el prostíbulo de su madre. El filme recibió buenas críticas y Lawrence ganó otro premio por él.
Al año siguiente protagonizó el videoclip de la canción The mess I made del grupo de rock Parachute, antes de comenzar a filmar el rol que la lanzaría definitivamente al estrellato.
En 2010 se estrenó Winter's Bone, un drama independiente protagonizado por Lawrence como Ree, una joven de 17 años de escasos recursos que debe cuidar de sus dos hermanos menores y su madre con trastornos mentales, y que luego debe ir en busca de su padre desaparecido para evitar que su casa les sea confiscada.
El filme se estrenó en el prestigioso Festival de Cine de Sundance, logrando el premio principal del evento y poniendo a la joven actriz en el centro de las miradas de la crítica; los expertos coincidieron en que se trataba de una actuación que la convertiría en una estrella. Los galardones comenzaron a caer sobre Lawrence, y su estatus de estrella quedó sellado cuando se reveló que estaba entre las nominadas al Oscar a la Mejor Actriz por Winter's Bone.
Ese mismo año también estrenó La Doble Vida de Walter, el debut como directora de la actriz Jodie Foster, una comedia dramática sobre un hombre -Mel Gibson- con problemas familiares que comienza a hablar con una marioneta de castor. En 2011 formó parte del elenco del filme romántico Like Crazy, que también triunfó en Sundance.
También en 2011 tuvo su primera superproducción de éxito mundial como parte del elenco de X-Men: Primera Generación, la precuela de la saga cinematográfica basada en los cómics de Marvel. En ella recayó el rol de la mutante Mystique, con capacidad de transformarse en cualquier otra persona.
Lawrence no había visto ninguna de las películas previas de la saga antes de conseguir el papel, aunque admite haberse convertido en fanática luego de ponerse al día. La actriz se puso a dieta y comenzó un régimen de entrenamiento de dos horas diarias para mantenerse en forma para el papel. Además, para las escenas en las que el personaje debía aparecer en su forma natural azul, la actriz debió someterse a sesiones de maquillaje que podían durar hasta ocho horas.
La película fue un éxito global de taquilla y aclamada por la mayoría de los críticos como uno de los mejores filmes de la saga iniciada por Brian Singer en 2000.
Pero el mayor taquillazo de Lawrence hasta la fecha legaría al año siguiente, luego de que se impusiera a numerosas otras actrices en la carrera por el codiciado papel protagónico de la adaptación de la exitosa novela de Suzanne Collins Los Juegos del Hambre. Seleccionada por el director Gary Ross y la propia Collins, Lawrence asumió el rol de Katniss Everdeen, habitante de un empobrecido distrito de la nación de Panem, en lo que alguna vez fueron los Estados Unidos; Katniss es seleccionada para participar en los Juegos del Hambre, un evento anual en el que varios jóvenes son enviados a pelear a muerte.
La rubia actriz se tiñó el pelo de castaño para el papel, además de comenzar una severa rutina de entrenamiento que incluyó practicar arquería -una habilidad clave de su personaje-, escalar rocas y árboles, aprender a pelear, hacer yoga y parkour.
El filme recibió críticas mayormente positivas -la mayoría de las alabanzas fueron, de nuevo, para Lawrence por su interpretación de Katniss- y la película, muy esperada por los miles de lectores de las novelas en todo el mundo, fue un rotundo éxito comercial, llegando a convertirse en una de las películas más taquilleras del año pasado.
En 2012 también estrenó el filme de terror La Casa de al Lado, interpretando a una joven que se muda con su madre a una casa donde tuvo lugar una serie de asesinatos.
Finalmente, en 2012 también co-protagonizó El Lado Luminoso de la Vida, de David O. Russell. Lawrence interpretó a Tiffany, una joven viuda con trastornos de personalidad y adicción al sexo que conoce al protagonista del filme, Pat -el actor Bradley Cooper-, una persona con problemas similares a los de ella, con quien comienza una curiosa relación.
El de Tiffany era un rol al que aspiraron actrices como Zooey Deschanel, Anne Hathaway, Kirsten Dunst y Angelina Jolie, e inicialmente Russell no estaba convencido de que Lawrence, quien era vista como demasiado joven para el papel, fuera la adecuada, aunque se convenció de contratarla luego de su audición. La actriz se tiñó el pelo de negro y, a pedido del director, ganó un poco de peso para interpretar a Tiffany; además tuvo que aprender a bailar junto con Bradley Cooper, entrenando con la coreógrafa del popular “reality show” estadounidense So You Think You Can Dance.
El filme fue recbido con aplausos casi unánimes de la crítica tras su estreno en el Festival de Cine de Toronto, Canadá, y cuando comenzó la temporada de premiaciones, el filme se situó como uno de los principales candidatos a los más grandes galardones. Lawrence ya había triunfado en algunos de los certámenes más importantes, como los Globos de Oro y los premios del Sindicato de Actores (SAG), por lo que todos los pronósticos la daban como ganadora en los premios de la Academia.
Los pronósticos tuvieron razón, ya que en la edición 85 de los premios, Lawrence fue proclamada como ganadora del Óscar a la mejor actriz, imponiéndose sobre actrices como Naomi Watts, Jessica Chastain, Quvenzhané Wallis y Emmanuelle Riva.
La flamante ganadora del premio de la Academia luego volvió a teñirse el pelo de castaño para interpretar de nuevo a Katniss Everdeen en Los Juegos del Hambre: En Llamas, la continuación de la taquillera saga basada en los libros de Collins.
Esta vez bajo órdenes del director Francis Lawrence y reunida con sus compañeros de elenco como Josh Hutcherson, Liam Hemsworth, Donald Sutherland y Woody Harrelson -a quienes se sumaron figuras como Jena Malone y Philip Seymour Hoffman-, la actriz volvió a someterse a un estricto régimen de ejercicios y entrenamiento adicional en arquería de cara a las exigentes escenas de batalla que presentaría el filme.
En Llamas se estrenó en los Estados Unidos en noviembre, recibiendo el aplauso casi unánime de la crítica, que la consideró por lo general una película ampliamente superior a su antecesora, y de nuevo se dirigieron elogios en especial a la actuación de Lawrence como la atormentada Katniss. La película iría a convertirse en uno de los mayores éxitos comerciales del año, recaudando más de 855 millones de dólares en todo el mundo.
Además, el año pasado la actriz volvió a ponerse a las órdenes del director David O. Russell para trabajar en su siguiente película Escándalo Americano, que es la obra que ahora la tiene de nuevo en competencia por un premio de la Academia.
En la película Lawrence interpreta a Rosalyn Rosenfeld, la inestable e impredecible esposa de un estafador, Irving (Christian Bale), quien se ve atrapado por el FBI, y obligado a colaborar con las autoridades para lograr arrestos a cambio de su propia libertad.
Junto con su co-estrella Amy Adams, Lawrence fue una de las intérpretes más aclamadas en la película, con los críticos afirmando que la actriz se roba cada una de las escenas que protagoniza, aunque sean pocas en comparación a sus compañeros de elenco.
Los premios le han llovido a la actriz desde el comienzo de la temporada de premiaciones, incluyendo galardones com0 el Globo de Oro y los premios de numerosas asociaciones de críticos de los Estados Unidos.
Jennifer Lawrence es la actriz más joven con tres nominaciones en la historia de los premios de la Academia, y el próximo 2 de marzo podría convertirse en la más joven doble ganadora.