La magia de Oz sigue viva 75 años después

LOS ÁNGELES. El clásico de Hollywood “El Mago de Oz” cumplió esta semana 75 años desde su estreno en cines.

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Muchos han festejado en Estados Unidos el aniversario asistiendo a pases especiales del filme e incluso disfrazándose como sus entrañables personajes para lograr un récord Guinness. El epicentro de las celebraciones fue la localidad de Oconomowoc, en Wisconsin, que rememoró su día de gloria cinematográfica, el 12 de agosto de 1939, cuando centró las miradas de la meca del cine por acoger la “premiere” de una película que haría historia.

El estudio Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) decidió presentar en esa pequeña población su ambicioso largometraje, con el que quería responder al éxito de Blancanieves (Disney, 1937), ya que tenía dudas sobre cómo acogería el filme el público del medio oeste, zona donde está ambientado parte del relato.

La película añadía el factor del Technicolor, al pasar de los tonos sepias al color para dar un aspecto mágico al mundo de Oz, y fue para muchos espectadores, al menos en Oconomowoc, la primera experiencia visual de cine más allá del blanco y negro.

El pasado martes, esa población, que ya no conserva el teatro donde se exhibió originalmente el filme, organizó una proyección al aire libre de El Mago de Oz a la que muchos animados residentes acudieron vestidos de hombre de hojalata, espantapájaros, león y Dorothy, personajes que protagonizan la historia.

El Mago de Oz se basó en una novela de L. Frank Baum que relata el viaje de Dorothy (Judy Garland) y su perro Toto a las misteriosas tierras de Oz después de ser succionados por un tornado en Kansas.

La joven, desesperada por encontrar la forma para volver a su casa, terminará entablando amistad con un hombre de hojalata que añora un corazón, un león que ansía ser valiente y un espantapájaros que sueña con tener cerebro, y juntos recorrerán un largo camino de baldosas amarillas que conduce al palacio habitado por el Mago de Oz.

La razón por la que el estreno de El Mago de Oz fue en Wisconsin y no en Kansas, donde está el ficticio hogar de Dorothy, no está clara, pero eso no ha impedido que los homenajes se repitan también en ese estado con recurrentes proyecciones del filme y eventos para tomarse fotografías con Dorothy y su perro Toto.

Al norte, en Grand Rapids, Minesota, tuvo lugar otro de los acontecimientos de estos festejos.
El 13 de junio, más de 1.000 personas se disfrazaron de los personajes del largometraje, lo que valió a esa localidad un récord Guinness.

Grand Rapids fue el lugar de nacimiento de Judy Garland y es donde se encuentra su museo, que desde junio ha estado muy activo para conmemorar el 75º aniversario de la película.

Otro de los destacados tributos al filme fue el de la Academia de Hollywood en la pasada gala de los Óscar, donde la cantante Pink interpretó el tema Over the Rainbow, que en 1940 fue merecedor de la estatuilla de mejor canción. El Mago de Oz ganó un segundo Óscar por su banda sonora.

En 2013, el Mago de Oz demostró seguir siendo poderoso, al menos en los cines, y esta vez de la mano de Disney que se las ingenió para crear de la nada una precuela del clásico de MGM que tituló Oz el Poderoso que demostró ser un buen negocio. El filme de Sam Raimi recaudó casi 500 millones de dólares en taquilla y ya se dio luz verde a una secuela de la cual se desconocen los pormenores del guión que estará limitado por cuestiones de propiedad intelectual.

El relato The Wonderful Wizard of Oz de Baum es de dominio público, por lo que el material es accesible a Disney, aunque el estudio no podría utilizar elementos añadidos en la cinta de 1939 producida por MGM y ahora propiedad de Warner Brothers, como los zapatos de rubí de la protagonista.

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