La noticia del Premio de la Academia a Paolo Sorrentino (Nápoles, 1970), autor de películas como Il Divo (2008), copó las páginas más destacadas de los medios y suscitó las menciones de autoridades e intelectuales de Italia, que agradecieron al director haber recuperado un premio que no recaía en manos italianas desde hace 16 años.
La grande bellezza narra el 65º verano de Jep Gambardella (Toni Servillo), un ácido y mordaz escritor que solo ha escrito un libro de éxito y que se sitúa en el epicentro de la vida social romana, caracterizada por el hastío y lo vacuo.
Una vida social que se desarrolla en una magnífica Roma y donde intelectuales, políticos de medio pelo, artistas en decadencia y escritores frustrados, entre otros, se dan cita en fastuosos palacios, testigos de sus inverosímiles conversaciones y sus inestables relaciones.
La cinta ya dio señales de éxito con la conquista de galardones como el Bafta y el Globo de Oro al Mejor Filme Extranjero.
El Óscar a la cinta italiana ha suscitado la reacción de personalidades dispares del país, como políticos, periodistas o entrenadores de fútbol.
El jefe del Estado, Giorgio Napolitano, paisano del cineasta, expresó su alegría ante la noticia. “Se ha recuperado justamente en el filme de Sorrentino el sentido de la gran tradición del cine italiano y de una nueva capacidad creativa que representa la realidad y las costumbres de nuestro tiempo. Es un reconocimiento espléndido y una espléndida victoria para Italia”, afirmó.
Por su parte, el ministro de Cultura, Dario Franceschini, felicitó a Sorrentino y aludió a la capacidad artística de Italia. “Es la demostración de que si Italia, creyendo y confiando en sí misma, invirtiendo en creatividad, inteligencia, belleza, arte, historia y cultura, puede conseguir cualquier reto que se proponga”, reivindicó el ministro.
Incluso el técnico español del Nápoles, Rafa Benítez, se sumó a las felicitaciones y recordó, con un símil futbolístico, que Sorrentino ha conseguido su objetivo con esfuerzo. “Felicidades a Paolo, que alcanzado su objetivo partido tras partido y al fin podemos decir que el balance ha sido de verdaderamente fantástico. ¡Grande Sorrentino y Forza Nápoles!”, exclamó.
Además, los medios de comunicación han llevado a cabo una gran cobertura de la noticia y aluden al regreso de Italia al panteón del cine.
El diario de mayor difusión del país, Il Corriere della Sera, abrió su edición digital con el titular: “Sorrentino triunfa en Hollywood” y recordó que con el Óscar a La grande belleza, Italia suma trece estatuillas a la Mejor Película de habla no inglesa, “una más que Francia”.
Por otro lado, La Repubblica abrió su digital con el título “La estatuilla regresa a Italia” y con una crónica en la que se recordó que el Óscar no había caído en manos italianas desde hacía 16 años, con La vida es bella (1997) de Roberto Benigni. Además, este diario incluye una guía sobre los lugares donde se ha grabado la película y una amplia galería fotográfica.
La RAI dedicó hoy un coloquio de expertos y críticos que ensalzaron la figura de Sorrentino y apuntaron a las similitudes entre su cine y el de Federico Fellini (1920-1993), ganador de cuatro premios Óscar más uno honorífico y director de películas como La Dolce Vita (1960) , Amarcord (1973) u Otto e mezzo (1963).
Entre las cien cintas más vendidas en la librería italiana Feltrinelli, La gran belleza ocupa el primer lugar.