Su película Birdman se llevó 4 premios, de los cuales 3, mejor película, mejor director y mejor guión, fueron para él.
Iñárritu se mostró exultante ante la prensa congregada en un salón cercano al teatro Dolby de Hollywood, lugar al que acudió con una estatuilla en cada mano y en el que pidió a los periodistas que subsanaran un despiste que tuvo durante la gala.
“Le debo esto a mi mamá. Mi madre es parte de este viaje, está muy viejita y quiero que lo sepa. Ella estaba viendo (el evento) por la televisión”, manifestó el artista, al que se le preguntó numerosas veces en español, para frustración de los reporteros no hispanohablantes. “Esto es tan bueno, se siente como estar en México, no tengo que hablar en inglés”, dijo paradójicamente en inglés.
Iñárritu declaró que fue “la virtud del trabajo” lo que le había llevado al reconocimiento logrado hoy, pero rechazó hablar en términos de carrera y de competencia para referirse a su trayectoria y a los Óscar. “No tengo una carrera, tengo una vida y no sé lo que pasará, pero hoy es genial. Me siento orgulloso, contento y feliz por todo lo que ha causado esta película y que muchos mexicanos estén contentos de este éxito es un privilegio”, aseguró.
Iñárritu ya había optado a varios Óscar en 2007 con su película Babel, que fue candidata a siete premios, pero en aquella ocasión se fue de vacío (Babel ganó solo como mejor banda sonora, Gustavo Santaolalla), sin embargo descartó valorar aquel momento como un trago amargo.
“Cuando te nominan no se pierde. Estamos obsesionados con competir”, indicó para señalar que las personas necesitan derrotar a otras para estar bien consigo mismas. “Me gustaría que esta ceremonia fuera un espectáculo sobre los mejores filmes seleccionados”, apuntó el mexicano, que dijo sentirse afortunado cada vez que es capaz de terminar una película.
Iñárritu aceptó divertido el comentario que hizo Sean Penn cuando anunció que Birdman ganaba como mejor película -Penn dijo “¿Quién le dio la tarjeta verde (green card o permiso de residencia y trabajo en EE.UU.) a este hijo de puta?”, un comentario que viene de tiempo atrás, cuando el actor rodó para él 21 Gramos.
“Sean y yo tenemos esa brutal relación. Cuando hicimos 21 Gramos siempre estaba con ese tipo de bromas. Yo no lo encontré ofensivo, me resultó muy gracioso”, señaló al tiempo que recordó lo duro que le hizo trabajar a Penn en aquella película.
Tras su gran triunfo, el mexicano declaró que se iba a festejar con la familia y los amigos.