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Luego de debutar en los largometrajes con la película de 2008 “El Reflejo” y conseguir su primer gran éxito de taquilla el año pasado con la superproducción “Libertad”, el realizador paraguayo de cine Gustavo Delgado trae a las salas locales desde este viernes su tercera producción: “Fin de la Línea”.
Mientras “El Reflejo” daba una mirada de intriga al mundo empresarial y “Libertad” hacía un recuento de los acontecimientos que llevaron a la independencia de Paraguay en 1811, en “Fin de la Línea” Delgado toca otro tema de la vida real de gran impacto en la sociedad paraguaya: el narcotráfico.
“Fin de la Línea” es la historia de dos policías encubiertos que se infiltran en la organización criminal de Roberto (Sergio González), el contacto en Paraguay de poderosos narcotraficantes colombianos que usan al país como vía de tránsito para sus narcóticos.
La película cuenta también con las actuaciones de Lucía Valdés, Liliana Álvarez, Marcelo Merlo, Wilton Vuyk, Juan Manuel Acevedo, Andrea Urunaga y Ernesto Rotela. Como hiciera en “El Reflejo”, el director buscó actores sin demasiada experiencia, a fin de evitar que el público lleve a las salas prejuicios sobre un actor o actriz.
“Fin de la Línea” se filmó en tan solo 20 jornadas, según comentó Delgado a ABC Color. El rodaje tuvo lugar en 2010, antes de que el director pasara a realizar “Libertad”. Como puede verse en los avances, se aprecia un constante tono gris, con exteriores nublados, una decisión intencional por parte del director, quien quería plasmar el drama de las drogas como un asunto “gris”, en contraste con el colorido con el que ese mundo se presenta en muchas producciones cinematográficas.
El director aseguró que se trata de una película hecha principalmente con el público en mente, buscando entregar su mensaje pero al mismo tiempo entretener y tener en suspenso a la audiencia.
La principal fuente de ese suspenso parece ser el personaje de Roberto, a quien el actor Sergio González describió como “un psicópata”, aunque no uno histriónico y exagerado, sino uno frío de gestos y acciones.
La película llega recomendada para mayores de 16 años por el alto contenido de violencia que tiene, y con una duración calculada en 70 minutos.
Estará en exhibición desde el viernes en cines de Asunción, San Lorenzo y Encarnación.