La cinta, que se estrena hoy en Estados Unidos y el 29 de noviembre en España, narra la historia de un abogado (Michael Fassbender) que, para conseguir dinero, se mete en una operación ilícita de narcotráfico mexicano, que le aboca a un destino inesperado.
Tanto él como su prometida, Laura (Cruz), pagarán las consecuencias de un plan en el que también están implicados el poderoso empresario Reiner (Bardem), emparejado con Malkina (Cameron Díaz), y el sórdido intermediario Westray (Brad Pitt).
“Es una historia implacablemente precisa y despiadada, como a menudo es la vida”, dijo Scott durante la presentación en Londres del filme, que, pese a estar ambientado en la frontera de Estados Unidos con México, fue rodado casi en su totalidad en España.
Se trata del primer guión del escritor estadounidense Cormac McCarthy -autor, entre otras obras, de “La carretera” y “No es país para viejos”- y, como sus novelas, “tiene el poder de hacerte sentir incómodo”, apunta el director.
Con largos y densos diálogos, el argumento, que McCarthy escribió en forma de novela corta, combina la acción y evocadores paisajes con un mensaje algo filosófico sobre “los efectos que tienen las decisiones que uno toma”, señala Fassbender.
El actor germano-irlandés, que ya trabajó con Scott en “Prometheus”, es el abogado protagonista (conocido solo como "El Consejero"), una persona “arrogante que se cree más lista de lo que es” y que, “por inseguridad”, “desea acumular posesiones y vive por encima de sus posibilidades”, explica en entrevista con Efe.
Esa avaricia le llevará a sacrificar más de lo previsto, apunta el intérprete, que cree que la obsesión por tener cosas para mostrar estatus “es algo muy propio de la sociedad occidental” y refleja "un momento muy actual".
Otra víctima de sus inseguridades es el personaje de Bardem, “un extravagante propietario de clubs nocturnos que necesita constantemente ser aceptado por los demás”, a fin de “tapar una parte de él que está vacía”, explica el actor español.
Con llamativas gafas de sol y vistosas camisas de Versace, Reiner vive bajo el influjo de su seductora y misteriosa novia, Malkina, una “depredadora” -según se dice en la película- magistralmente interpretada por Cameron Díaz.
Esta es la primera vez desde “Vicky Cristina Barcelona”, de Woody Allen, que Javier Bardem y su esposa, Penélope Cruz, coinciden en un rodaje, si bien no comparten escenas.
Cruz es la bella prometida de “El Consejero”, que “se ve arrastrada y sufre las consecuencias de las acciones de otros”, lo que, a ojos de la actriz, la convierte en “una víctima”.
“Laura representa la luz, la que confía, la optimista, todo se va a solucionar, y, cuando se da cuenta de que está metida en un agujero muy negro, sin salida, debido a las acciones de otra persona, es demasiado tarde”, dice a Efe en Londres.
Cruz disfrutó de actuar con Michael Fassbender, con quien comparte una tórrida escena al principio de la película, pues con él “todo surge muy fluido”, y también “aprendió mucho” de Ridley Scott, con quien hacía tiempo que quería trabajar.
El cineasta británico, responsable de clásicos como “Alien” (1979) o “Thelma y Louise” (1991), revela con humor que McCarthy, quien le eligió como director para su ópera prima, fue “un incordio” durante el rodaje, al que asistió cada día, si bien en todo momento “escuchó su opinión”.
El resultado es una película compleja donde a veces se anteponen las palabras a la narrativa visual, pero que, según Bardem, “dice dos o tres cosas que vale la pena escuchar”.
“Tiene momentos oscuros, duros y violentos, pero que no se tratan con el glamour típico de las películas de acción, sino que el autor, en este caso Cormac McCarthy, está diciéndonos algo, que Ridley ha decidido también contar y que tiene que ver con las consecuencias, lo que significa tomar malas decisiones”, razona.
“Aunque la alusión a lo material es importante, yo creo que lo más clave es el mensaje de que ir por la vida como de naif, como de no querer enterarse de nada, puede hacer mucho daño, tanto a ti como a los demás”, concluye el actor español.