La 64 edición del “más pequeño de los grandes festivales”, después de Cannes, Berlín y Venecia -como lo describen sus organizadores-, tendrá también una marcada presencia de realizadores latinoamericanos, que lo consideran un trampolín hacia Europa.
Sin olvidar el glamour: durante sus nueve jornadas, San Sebastián (norte de España) se transformará en una alfombra roja por la que desfilarán estrellas de la gran pantalla como Sigourney Weaver, Richard Gere, Monica Bellucci, Isabelle Huppert, Gael García Bernal o Javier Bardem.
“Estamos convencidos de que esta es una de las grandes ediciones” , indicó a AFP el director del festival, José Luis Rebordinos, al destacar lo “equilibrado” de la muestra, una mezcla de nombres de directores muy conocidos con óperas primas, apuestas radicales y otras más comerciales.
Abarcando 232 largometrajes, el festival donostiarra descorre el telón el viernes con La fille de Brest de Emmanuelle Bercot, un drama que narra la historia de Irene Frachon, la neumóloga que destapó el escándalo sanitario del medicamento Mediator.
Esa historia de la vida real es una de las 25 películas de la sección oficial, 17 de ellas en competencia por la Concha de Oro, que el año pasado obtuvo Sparrows del islandés Rúnar Rúnarsson.
Fuera de concurso se estrenará el domingo la esperada Un monstruo viene a verme, la última propuesta del director español que ha pisado fuerte en Hollywood, Juan Antonio Bayona, una película de fantasía interpretada por Liam Neeson, Felicity Jones, Sigourney Weaver y Geraldine Chaplin.
También se proyectarán fuera de concurso el filme experimental sobre el fallecido director Bigas Luna Bigas x Bigas y L’Odysée de Jérome Salle, sobre la difícil relación entre el explorador Jacques Costeau y su hijo Philippe, encargada de cerrar el festival el sábado 24.
En la carrera por la Concha de Oro compiten American Pastoral, la ópera prima del actor escocés Ewan McGregor; Yourself and yours, de Hong Sang-Soo, uno de los directores surcoreanos más consolidados; Eidurinn, lo último del islandés Baltasar Kormákur; o el debut en formato largo del inglés William Oldroyd, Lady MacBeth.
En la sección oficial participan dos películas latinoamericanas: la argentina El invierno de Emiliano Torres, y la coproducción chileno-colombiana-francesa Jesús, del chileno Fernando Guzzoni, ya galardonado en San Sebastián como nuevo director en 2012.
Alberto Rodríguez con El hombre de las mil caras, Jonás Trueba con La reconquista y Rodrigo Sorogoyen con Que Dios nos perdone representarán a España en la competencia, dirimida por un jurado presidido por el danés Bille August, ganador de dos Palmas de Oro en Cannes y un Óscar, junto a la directora argentina Anahí Berneri y el realizador chino Jia Zhang-ke, entre otros.
El séptimo arte de América Latina tiene su apartado propio con “Horizontes latinos”, en el que compiten trece películas de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, México, Venezuela.
La argentina El rey del Once de Daniel Burman, la brasileña Era o Hotel Cambridge de Eliane Caffé, la chilena Rara de Pepa San Martín o la venezolana El Amparo de Rober Calzadilla pelearán por el trofeo que en 2015 consiguió Paulina, del argentino Santiago Mitre.
La sección “Cine en construcción”, seguirá presentando a nuevos talentos latinoamericanos que buscan respaldo europeo para finalizar sus películas, o “Perlas”, que exhibe filmes exitosos de otros festivales, entre ellos Neruda, dirigida por Pablo Larraín y protagonizada por Gael García Bernal, saludada por la crítica en Cannes.
De hecho, el mexicano García Bernal estrenará en San Sebastián el nuevo premio Jaeger-LeCoultre al cine latino, mientras que los actores estadounidenses Sigourney Weaver y Ethan Hawke serán homenajeados con el también honorífico premio Donostia.