“No nos gustan los asesinatos”, aclara Aniston intentando mantener una profesional cara de póker en la capital gala, donde ambos acudieron a presentar esta película, que se estrena en la plataforma digital el próximo viernes 31.
"En la primera éramos jóvenes, novatos. Ahora entendemos el asesinato. ¡Nos encanta el asesinato!", reitera Sandler entre risas, haciendo caso omiso a su compañera.
La dinámica real entre estas dos superestrellas estadounidenses, que ya han filmado tres películas juntos, se asemeja bastante a la del matrimonio que interpretan en la saga que comenzó con Misterio a bordo (2019, dirigida por Kyle Newacheck), Nick y Audrey Spitz.
"Nos gusta estar casados y nos hacemos reír", apunta Aniston.
"Sí, nos gusta estar casados y la única forma de hacerlo es en las películas", completa Sandler.
En esta nueva entrega, dirigida por Jeremy Garelick, el policía que no sabe disparar y la peluquera devenida detective volverán a verse envueltos en un homicidio al más puro estilo Agatha Christie, en el que todas las potenciales pistas apuntan hacia ellos mismos.
Si la primera, ambientada en un lujoso barco, era una reinvención disparatada de Asesinato en el Expreso de Oriente, en Misterio a la vista se repite en parte la fórmula, con toques de Bollywood, de Misión Imposible y hasta algo de Emily en París.
Pero sobre todo, lo que diferencia a esta secuela es la cantidad de acción que contiene.
"Mucha más acción", resume Aniston.
"¡Acción triple!", completa Sandler.
"Empezamos nuestro propio negocio", comienza a detallar Aniston sobre la trama que lleva a los dos protagonistas a crear su propia agencia de investigadores.
"¡Eso! ¡Una película de negocios!", interrumpe Sandler detonando una nueva mirada asesina de su compañera, que casi inmediatamente estalla en una carcajada.
Cuatro años después de haber resuelto su primer gran misterio, los Spitz han dimitido de sus puestos de trabajo y tratan de mantener a flote su propia agencia de detectives privados, sin mucho éxito.
Una invitación de boda de su amigo el Maharaja (Adeel Akhtar), con todos los gastos pagados, parece una ocasión perfecta para desconectar del estrés laboral y matrimonial, hasta que las celebraciones se ven interrumpidas por un nuevo asesinato y por el secuestro del propio novio.
"Es nuestro trabajo, hacer reír a la gente", explica Aniston sobre su buena química en pantalla con Sandler.
"Lo intentamos, ciertamente", agrega él.
En parte en broma y en parte -quizás- en serio, Sandler asegura que las tres películas que ya rodaron juntos son solo el principio.
"Planeamos, para el fin de nuestras vidas, doce películas juntos", certifica Sandler con humor.
De su compañera de reparto, el protagonista de títulos como Diamantes en bruto destaca sobre todo lo mucho que se preocupa por los demás y lo divertida que es.
"Literalmente me cuida más a mí de lo que me cuido yo a mí mismo", dice.
“Lo hago por Jackie (la esposa del actor) y los niños”, ataja la estrella de la serie Friends.
Ella quiere que Sandler tenga una "vida larga", dice él, aunque al actor no le importaría morirse "mañana".
"¡¿Qué?!", se alarma Aniston al oír el comentario de su compañero.
"He tenido suficiente", bromea Sandler.
"Tienes hijos", recuerda ella.
“Jackie estaría triste, tienes razón, pero nadie más”, bromea el intérprete.