Protagonista del documental "Trance", del cineasta Emilio Belmonte, el flautista y saxofonista Pardo desgranó al margen del filme su particular visión de la vida y de la música, alejada de etiquetas.
"Las fronteras entre géneros no están en la música. Todas las músicas tienen sus aspectos esenciales, pero la industria tiene que vender su producto y poner etiquetas, y mi generación ha tratado de evitar esas fronteras", subraya quien generalizó por primera vez el uso de instrumentos de viento en el flamenco.
El filme sigue durante dos años a Pardo -un "samurái del flamenco", como lo ha catalogado Belmonte- a través de sus continuos viajes por el mundo para dar conciertos.
Con el hilo argumental de organizar un concierto en Madrid titulado "Trance", la cámara recoge los encuentros de Pardo con viejos amigos como Chick Corea, Niño Josele o Pepe Habichuela mientras se cuela en la intimidad del músico para mostrar las contrapartidas de su vida nómada.
"Hay muchas cosas en tu vida que no controlas, así que tienes que improvisar. Pero al mismo tiempo sabes hacia dónde quieres ir", reflexionó Pardo, haciendo un paralelismo con el jazz.
De la misma forma, esa intuición le llevó a aceptar la propuesta de Belmonte de hacer un documental sobre su vida: "Es una cuestión de 'feeling'. Sigo mucho mis intuiciones, no tengo mucho espacio para la reflexión. Emilio es muy entusiasta y comunica muy bien sus pensamientos; no tenía nada que perder".
Tras grabar 250 horas de película y seguir más de cien días al músico, desde la India a Nueva York pasando por el barrio de Las Tres Mil Viviendas en Sevilla, Belmonte tiene una cosa clara, que no quiere "nunca" volver a tener tanto material, reconoció entre risas.
Para el director almeriense, afincado desde hace décadas en París, su película pretende evidenciar que en el flamenco "la oposición entre tradición y modernidad no existe, está todo mezclado".
Y lo hace de la mano de alguien que puede presumir, sin un átomo de soberbia, de haber participado en momentos cruciales de la música española como el disco "La leyenda del tiempo", de Camarón de la Isla, o el legendario Sexteto de Paco de Lucía.
Por el certamen londinense de cine español, que se clausura mañana, jueves, pasarán también nombres como el de Bollaín, que presenta hoy su "Maixabel", o el actor Daniel Grao, que protagoniza "La casa entre los cactus".
Como es habitual, el festival, dirigido por Joana Granero, abre sendas ventanas al cine catalán y al vasco, al que este año se ha incorporado también un apartado dedicado a Andalucía.
Además de su sede tradicional en el Ciné Lumière de la capital británica, este año la organización ha llegado a un acuerdo para proyectar filmes, como hoy "Maixabel", en Riverside Studios, uno de los centros artísticos de más solera de la capital británica.