La revista The Hollywood Reporter apuntó este lunes que, si las conversaciones llegaran a buen puerto, Cooper será uno de los alicientes de esta película que Anderson dirigirá, escribirá y producirá.
El plan es comenzar a grabar esta película en otoño, pero todo dependerá de cómo esté la situación de la pandemia en Los Ángeles (EE.UU.) para entonces.
Anderson es uno de los nombres en mayúsculas del cine contemporáneo desde que, con solo 27 años, triunfara con Boogie Nights (1997), su segunda película tras debutar con Hard Eight (1996).
Después de Boogie Nights llegaron otras joyas como Magnolia (1999), Petróleo sangriento (2007), The Master (2012) o la reciente Phantom Thread (2017).
Anderson ha sido nominado en ocho ocasiones a los Óscar, pero nunca se ha llevado la estatuilla.
Por su parte, Cooper, conocido por sus papeles en cintas como American Sniper (2014) y la trilogía de ¿Qué pasó ayer?, arrasó con su ópera prima como director Nace una estrella (2018), un nuevo “remake” de este clásico del drama musical que en esta ocasión coprotagonizó junto a Lady Gaga.
Esta película recaudó 436 millones de dólares en todo el mundo y se llevó el Óscar a la mejor canción original.
Cooper, en cambio, ha sido candidato en siete ocasiones a los premios de la Academia de Hollywood, pero nunca ha ganado el Óscar.
De cara al futuro, Cooper tiene previsto dirigir y protagonizar una película biográfica para Netflix sobre el genio de la música Leonard Bernstein.
Y también será el actor principal de Nightmare Alley, la primera película del mexicano Guillermo del Toro tras el éxito de La forma del agua (2017) y en cuyo reparto figuran también Cate Blanchett, Toni Collette, Rooney Mara y Willem Dafoe.