“Yo me veo más como un documentalista que dirige de la manera más ajustada a la realidad posible, no puedo juzgar mucho más”, respondió Emmerich en una entrevista con Efe sobre el patriotismo de algunas películas estadounidenses basadas en guerras históricas.
Midway llegó a los cines de Paraguay esta semana, de la mano de uno de los principales creadores de éxitos en taquilla ajenos a las todopoderosas franquicias de Marvel o Star Wars.
En esta ocasión, el director se centró en la base militar de Pearl Harbor y la batalla de Midway, un lugar ubicado en el medio del pacífico y en el que el enfrentamiento entre Japón y EE.UU. fue decisivo durante la II Guerra Mundial.
“Es una película histórica, quizás el argumento es patriótico”, reflexionó Emmerich, quien nacido en Alemania ha desarrollado importantes películas sobre la historia de EE.UU. con vertiente militar, como El Patriota, pero también sobre la lucha los derechos LGTB en Stonewall o la crisis climática en El día después de mañana.
El cineasta explicó desde Hawái, a unos minutos de la base militar de Pearl Harbor, que algunas veces hay que contrarrestar lo que se ve en el cine con otra información, pero defendió que en su reciente trabajo narró los acontecimientos de la “forma más precisa posible”.
Asimismo, añadió que siempre estuvo fascinado por este capítulo histórico que “cambió el curso de la II Guerra Mundial” y, por lo tanto, tuvo un importante papel en configurar el mundo tal y como lo conocemos ahora.
“Era importante dar a conocer que los estadounidenses nunca quisieron entrar en esa guerra y estaban increíblemente poco preparados”, indicó Emmerich antes de apuntar que la mayoría de recursos estaban centrados en el frente europeo en lugar de en esta batalla en medio del océano Pacífico, quizás una de las más estudiadas en la historia contemporánea.
Para narrar este capítulo, Emmerich se rodeó de un reparto coral de estrellas compuesto por Ed Skrein, Patrick Wilson, Luke Evans, Aaron Eckhart, Nick Jonas, Mandy Moore, Dennis Quaid y Woody Harrelson.
Por su parte, Tadanobu Asano y Jun Kunimura lideraron la interpretación de los personajes del bando japonés, que a pesar de ocupar menos tiempo en el guion, fueron una prioridad de Emmerich.
“Para mí era superimportante mostrar la parte japonesa y hacer de los japoneses personas humanas reales, no mera gente que tenía que ser destruida -argumentó-. Sus actuaciones son nobles y valientes”.
Con Midway, Emmerich, considerado entre los 20 cineastas más rentables de la industria cinematográfica, regresa a la gran pantalla después del estreno en 2016 de Día de la Independencia: Contraataque, la secuela de Día de la Independencia que, según ha reconocido en la promoción de esta nueva cinta, él mismo lamentó rodar.
Día de la Independencia: Contraataque ingresó menos de la mitad que la cinta original y tuvo dificultades para resultar rentable a los estudios, algo que achacó a un cambio en la producción y al abandono de Will Smith en mitad del rodaje.
En esta ocasión, y con un presupuesto de más de 100 millones de dólares, Emmerich buscará repetir un nuevo “taquillazo” con su combinación de catástrofe, acción, guerra e historia.