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“El proyecto era expandir el teatro en comunidades campesinas e indígenas para poder rescatar lo que existía hasta ese entonces de lo mejor del teatro popular”, comentó Rojas con respecto a los objetivos del grupo Aty Ñe’ê, que desarrolló su actividad en la escena nacional entre 1975 y 1985.
La agrupación, según añadió, buscaba además “hacer participativa a la gente de manera que conozcan el teatro, que gusten del teatro, que si nunca lo habían visto a partir de este momento fuera parte de su vida cotidiana”.
Fue así que, constituidos como una ONG y con el patrocinio de la Fundación Interamericana del Congreso de los Estados Unidos, consiguieron una camioneta, un equipo fotográfico y unas luces para las funciones, antes de lanzarse a la aventura de recorrer el país.
El grupo fue conformado inicialmente por el dramaturgo Antonio “Tony” Carmona, Arturo Pereira, Blas Alcaraz, Ramón del Río, May Obregón, Cristina Gunsett, Hermes Jiménez, Alcibiades González Delvalle, además de Rojas.
Según recordó la actriz, durante cinco años estuvieron en el campo, llegando a localidades como Concepción, Pedro Juan Caballero, Saltos del Guairá, Encarnación, Coronel Oviedo, etc. Dos de estos años, estuvieron específicamente en el departamento de Caazapá.
En aquellas jornadas, comentó Rojas, llegaban a las comunidades “hacinados como sardinas” en una kombi. En otras ocasiones, debían dejar el vehículo para seguir el recorrido en carreta o a pie. “La gente era solidaria, nos recibían en sus ranchos, nosotros llevábamos nuestra provista, contribuíamos con lo que llevábamos a la estadía. Había un nivel de orgullo de hacerse campesino. Aún no había Itaipú, no había llegado el poder del dinero”, subrayó Rojas.
En las páginas del libro, editado con apoyo del Cabildo, se pueden ver imágenes de aquellas funciones y de los esfuerzos del grupo para seguir camino cuando la camioneta se quedaba atascada.
Las giras quedaron canceladas cuando desde el gobierno de Alfredo Stroessner llegó una advertencia. “Le dijeron a Taka Chase que si nos íbamos nos iban a matar a todos”, recordó Rojas.
Fue así que la agrupación decidió seguir apostando a hacer teatro desde Asunción, en alianza con la compañía independiente “La farándula”. En forma conjunta llevaron a escena “Mascarada en río revuelto”.
Otra obra que Rojas recuerda con especial estima es “Velada”, en la que recreaban las veladas de los años ’40, incluyendo a algunos de los artistas originales de este género teatral.
La autora confía en que este libro, editado con el apoyo del Centro Cultural de la República “El Cabildo”, inspire a las nuevas generaciones de artistas. “Esa experiencia fue una lucha cultural por la democratización del Paraguay”, refirió.
El material estará disponible gratuitamente para bibliotecas y centros culturales que lo soliciten al CCR Cabildo con una nota. También se puede encontrar en las librerías.