Un crimen que quedará impune

Seis personas fueron detenidas con 117 kilos de cocaína en una estancia en Concepción en 2007; sin embargo, nunca irán a la cárcel por ese hecho, ya que la justicia paraguaya cometió una serie de errores que facilitaron la libertad de todas.

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José Martínez Mendi Pavao, Rafael Novaes Chimenes, Bonifacio Coronel, Clemente Benítez, Mariano Pérez y Manuel López fueron detenidos y procesados por tráfico de drogas; no obstante, un Tribunal de Sentencia integrado por Doddy Báez, Silvio Reyes y Enrique Alfonso anuló las actuaciones fiscales y decidió sobreseer a todos.

Ni bien quedaron libres, los brasileños José Martínez Pavao -hijo del traficante de drogas Jarvis Pavao- y Rafael Novaes Chimenes abandonaron el país y fueron a radicarse en el Brasil. Se presume que sus empleados Mariano Pérez, Manuel López, Bonificio Coronel y Clemente Benítez también hicieron lo mismo.

De esta manera, todos los implicados en este caso dejaron el país. Sin embargo, el 7 de mayo pasado, los doctores Antonio Fretes y Alicia Pucheta, ministros de Corte, y el camarista Carlos Bray Maurice, quien integró la Sala Penal de la máxima instancia, resolvieron anular el sobreseimiento que se dictó en setiembre de 2010 a favor de los seis procesados.

De esta manera, quedó abierta la vía para poder volver a integrar un nuevo Tribunal de Sentencia y juzgar a los implicados en este caso.

Sin embargo, la realización de este nuevo juicio es muy difícil, a decir de las mismas autoridades judiciales.

El fiscal adjunto Marco Alcaraz, en representación del Ministerio Público, explicó que pese a que se abrió la posibilidad de volver a hacer un nuevo juicio, se ve casi imposible hacer que todos los procesados vuelvan a presentarse ante un tribunal en Paraguay.

“Independientemente de que se haya anulado el fallo del Tribunal de Sentencia y ordenado que se haga de vuelta el juicio oral, en la realidad eso es de difícil realización, porque Brasil no extradita a sus connacionales”, explicó el fiscal Alcaraz.

“El Poder Judicial, con una resolución como la que dictó en su momento el tribunal de sentencia en referido juicio oral, frustró la posibilidad de que el Ministerio Público ejerza la persecución penal en este importante caso”, recordó el fiscal Marco Alcaraz.

La causa se inició el 17 de agosto de 2007, cuando agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) realizaron un operativo en Concepción y detuvieron a seis personas con 117 kilos de cocaína.

Pese a que encontraron suficiente evidencia como para condenar por varios años a todos, las autoridades judiciales y de la Senad incurrieron en numerosos hechos que luego fueron atacados por la defensa de los imputados, al momento de pedir el sobreseimiento de todos.

Los jueces Doddy Báez, Silvio Reyes y Enrique Alfonso dieron curso favorable a los incidentes y liberaron a los imputados. Luego, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados destituyó a los integrantes de este Tribunal.

La causa se había extinguido para los brasileños y paraguayos. Pese a que ahora la Corte Suprema anuló el fallo por el que fueron liberados, volver a traer a José Martínez Mendi Pavao y Novaes Chimenes es una misión imposible, según la propia visión del Ministerio Público.

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