Cargando...
Este viernes llega a cines de Paraguay y varios otros países alrededor del mundo una de las películas más esperadas del año, Capitán América: Civil War, la 13ª película del llamado "universo cinematográfico" de Marvel, y la adaptación - al menos en nombre y en concepto general - de uno de los más influyentes eventos editoriales recientes de Marvel Comics.
Pero seguir una saga de doce películas previas puede ponerse complicado, así que quizá venga bien un poco de información para dar contexto y respuestas a algunas preguntas que uno podría hacerse al mirar los tráilers y toparse con cosas como un nuevo héroe desconocido de armadura negra y la repentina aparición de un nuevo Spider-Man.
Así que, sin más preámbulos...
El nombre “Civil War” corresponde a un importante evento en los anales de Marvel Comics, una serie que comenzó a publicarse en 2006 y cambió por completo el status quo del universo de los cómics de Marvel.
En su versión original, la historia partía del conflicto generado cuando un grupo de superhéroes novatos que protagonizaban un “reality show” se enfrentaron a un equipo de supervillanos en la ciudad de Stanford. La pelea, que acabó en las cercanías de una escuela, terminó con una masiva explosión que ocasionó las muertes de unas 600 personas, muchas de ellas niños. Esto, sumado a otros eventos previos que acabaron en desastres con pérdidas de vidas civiles, llevaron al Gobierno de los Estados Unidos a impulsar un Acta de Registro de Superhumanos, lo que indicaba que todo ser con superpoderes debía registrarse con el Gobierno, revelar a las autoridades su identidad secreta – si tenía una – y someterse a entrenamiento y regulación por parte del Gobierno.
Esto dividió a la comunidad de superhéroes en dos bandos. El lado pro-registro se vio liderado por Tony Stark (Iron Man), con la ayuda de grandes mentes como el líder de los 4 Fantásticos Reed Richards y el Ant-Man original, Hank Pym; por otro lado, el Capitán América, Steve Rogers, se opuso a la medida y, como consecuencia, se convirtió en un fugitivo, liderando a un grupo de héroes de igual postura desde la clandestinidad.
Spider-Man en particular se vio atrapado en medio del conflicto, primero poniéndose del lado de Tony – quien lo convenció de que, como un gesto simbólico de apoyo al registro, revelara su identidad a todo el mundo, y luego le dotó de un nuevo traje y protección para su familia – y luego cambiando de bando, perturbado por las medidas poco éticas que Iron Man empleaba, incluyendo el establecimiento de una prisión para superhumanos que era como un Guantánamo interdimensional, la creación de un clon de Thor que se salió de control con trágicos resultados, y el empleo de supervillanos como soldados en su causa. Todo esto acabó en una batalla a gran escala en plena Nueva York que culminó cuando el Capitán América, viendo el caos que la situación estaba causando, se rindió para restaurar la paz.
Por el hecho de que Capitán América: Civil War debe continuar una historia que Marvel Studios viene formando desde hace 12 películas, una adaptación muy directa del cómic Civil War es imposible. Las diferencias en las historias de los cómics y las películas son demasiadas.
La principal es, sin duda, que las identidades secretas, uno de los principales puntos de conflicto en la Guerra Civil de los cómics, no son un factor en el universo cinematográfico; en las películas Tony Stark (Robert Downey Jr.) anunció al mundo que es Iron Man, y todo el mundo sabe de las hazañas de Steve Rogers (Chris Evans), y los demás héroes que pueblan el universo cinematográfico o viven en la clandestinidad – Hulk o los agentes secretos como Viuda Negra y Hawkeye –, no son humanos como Vision o Thor, o simplemente no son conocidos por el público como Ant-Man.
Sin embargo, cómics y película sí comparten, por lo que se vio en los avances, la destrucción y la falta de regulación de las actividades de los superhéroes como punto de partida; en uno de los avances, el general Ross (William Hurt, regresando al papel que interpretó en El Increíble Hulk) cita el ataque extraterrestre a Nueva York en Los Vengadores, la desintegración de S.H.I.E.L.D. y la destrucción de su flota de portaaviones voladores sobre Washington DC en Capitán América: El Soldado del Invierno y la devastación de la ficticia ciudad europea de Sokovia en Avengers: Era de Ultron como motivos por los cuales “la gente tiene miedo”.
A eso se suma en la película algo que los cómics no tocaban: la participación del Soldado del Invierno, a quien el Capitán América busca reformar luego de reconocer su verdadera identidad, pero a quien el resto del mundo aún ve como un temible asesino.
Como en los cómics, los héroes del universo cinematográfico de Marvel se dividen en dos bandos, uno liderado por el Capitán América y el otro por Iron Man.
Lógicamente, ambos tienen a sus aliados más cercanos, Falcon (Anthony Mackie) para el primero y War Machine (Don Cheadle) para el segundo, en sus respectivos lados, y el Soldado del Invierno (Sebastian Stan) igualmente pelea del lado del Capitán. También siguen a Steve Rogers la Bruja Escarlata, Wanda Maximoff (Elizabeth Olsen), Ant-Man (Paul Rudd) y Hawkeye (Jeremy Renner).
En su propia esquina, Iron Man tiene también a la Viuda Negra (Scarlett Johansson), el androide Vision (Paul Bettany) y a los dos nuevos héroes de este universo: Spider-Man (Tom Holland) y Pantera Negra (Chadwick Boseman), el letal guerrero rey de la nación africana ficticia de Wakanda, de donde viene el asombroso metal que compone el escudo del Capitán América.
Pantera Negra, un héroe de gran relevancia dentro de los cómics de Marvel pero hasta ahora nunca visto en el cine, es el alter ego de T'Challa, rey de la nación africana de Wakanda, un reino de tecnología enormemente avanzada que se mantiene aislado del resto del mundo en el corazón de África, y de donde proviene el vibranio, el indestructible metal ficticio del que está hecho el escudo del Capitán América.
Tras su debut en Civil War, este personaje interpretado por el actor estadounidense Chadwick Boseman (Dioses de Egipto) tendrá su propia película, que será dirigida por el cineasta Ryan Coogler, director de las aclamadas Fruitvale Station y Creed, y estrenada en febrero de 2018.
En cuanto a lo de Spider-Man, para comprender por qué repentinamente el Hombre-Araña, con nuevo actor y todo, aparece junto a los Vengadores cuando hace solo dos años todavía era interpretado por Andrew Garfield, hace falta una pequeña lección de historia.
En los '90, cuando Marvel Comics se hallaba hundida en una crisis económica avasalladora, la compañía logró salirse de la bancarrota vendiendo los derechos para el cine de sus personajes a distintos estudios de cine; el estudio 20th Century Fox, por ejemplo, adquirió y todavía retiene los derechos de los 4 Fantásticos y los X-Men (razón por la cual no esperen ver a Wolverine peleando contra Iron Man en el futuro cercano) y Columbia Pictures, propiedad de Sony, se llevó los derechos de Spider-Man, lo que resultó en la taquillera trilogía de películas que el director Sam Raimi estrenó entre 2002 y 2007, con Tobey Maguire como Peter Parker.
Marvel recién iniciaría las actividades de su propio estudio de cine, Marvel Studios, con el estreno en 2008 de la primera Iron Man, el éxito taquillero que lanzó lo que llamamos el “universo Marvel” de películas interconectadas que luego incluiría las películas de Hulk, Thor, el Capitán América, los Guardianes de la Galaxia, Ant-Man y, lógicamente, los Vengadores. Civil War es la película número 13 de Marvel Studios.
En 2012, tras haberse frustrado los planes para una cuarta película de Spider-Man con Raimi y Maguire, Sony estrenó una nueva versión del personaje, interpretado por Andrew Garfield, llamada El Sorprendente Hombre-Araña. A pesar de ser éxitos de taquilla, esa película y su secuela de 2014, ambas dirigidas por Marc Webb, fueron vapuleadas por la crítica y no lograron convertirse en los aplastantes éxitos comerciales que Sony esperaba, lo que llevó a ese estudio a cancelar los planes de secuelas y “spin-offs” de su saga y sentarse a negociar una especie de “custodia compartida” del personaje con Marvel Studios.
Finalmente, ambos estudios llegaron a un acuerdo para incorporar a Spider-Man, en este caso una versión mucho más joven de Peter Parker interpretada por el británico Tom Holland (Lo Imposible), en el universo Marvel en Civil War, y luego darle su propia película, Spider-Man: Homecoming, que será producida por Sony pero contará con el jefe de Marvel Studios, Kevin Feige, a cargo de la toma decisiones creativas. Esta película, dirigida por Jon Watts (Cop Car), llegará a cines en julio de 2017. Ya se confirmó que Robert Downey Jr. aparecerá en esa película como Tony Stark.
Marvel ha estado dividiendo su calendario de películas en “fases”, concluyendo la “fase 2” el año pasado con Era de Ultron y Ant-Man. Por lo tanto, Civil War marca el inicio de una “fase 3” que este año incluirá también el debut en el cine de lado mágico del universo Marvel con Doctor Strange, dirigida por Scott Derrickson (Líbranos del Mal) y protagonizada por Benedict Cumberbatch (El Código Enigma) como el llamado “hechicero supremo”. Esta película llegará a cines el próximo mes de noviembre.
Posteriormente se estrenará la secuela de Guardianes de la Galaxia, sobre el equipo de renegados espaciales liderados por Chris Pratt. Este filme, de nuevo dirigido por James Gunn, llegará en mayo de 2017, y le seguirán la ya mencionada Spider-Man: Homecoming en julio y Thor: Ragnarok, la tercera película del héroe de Asgard interpretado por Chris Hemsworth – y además incluirá a Mark Ruffalo como Hulk y a una villana no identificada interpretada por Cate Blanchett – a estrenarse en noviembre de ese año bajo la dirección de Taika Waititi (Casa Vampiro).
En febrero de 2018 Marvel estrenará Black Panther, seguida en mayo por la primera parte de Avengers: Infinity War, que finalmente enfrentará a los Vengadores con la amenaza cósmica que viene asomando desde su primera película; la dirección ya no será de Joss Whedon, sino de los hermanos Joe y Anthony Russo, directores de Civil War. En julio de ese año, se estrenará también una secuela de Ant-Man, titulada Ant-Man and the Wasp.
En marzo de 2019, Marvel planea lanzar su primera película protagonizada por una heroína, Captain Marvel, sobre la piloto Carol Danvers, que adquiere poderes de origen cósmico. Ya en mayo de 2019 llegará la segunda y última parte de Avenger: Infinity War.
Más allá de eso, Marvel ya confirmó que tiene tres películas aún no reveladas que planea estrenar en mayo, julio y noviembre de 2020.