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La tos constante no debe ser ignorada en los fumadores. Este tipo de tos podría ser una señal de aviso del riesgo de padecer una enfermedad pulmonar grave, según estudios.
Además de esto, la falta de aliento, el aumento de mucosidad y los catarros frecuentesdurante el invierno son también signos de alarma a tener en cuenta y podría ser señal de la presencia de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
Este mal crónico es un padecimiento del sistema respiratorio no transmisible y prevenible. Produce dificultad para vaciar el aire pulmonar y obstruye el flujo aéreo. “Hace que los bronquios y alveolos pierdan su elasticidad. Las paredes alveolares se destruyen y los bronquiolos se engrosan. Se produce mayor cantidad de secreción que obstruye las vías respiratorias”, explicó la neumóloga Raquel Lemir.
El estudio Platino (Proyecto Latinoamericano de Investigación en Obstrucción Pulmonar) fue realizado a más de 5.500 individuos para medir la prevalencia de la EPOC en Brasil, México, Uruguay, Chile y Venezuela. Haciendo referencia a dicho documento, Lemir informó que “el tratamiento para tabaquistas es multidisciplinario e incluye fisioterapia, dieta y medicación con broncodilatadores”.
Según estimaciones de Platino, se prevé que para 2020, la EPOC se convierta en la tercera causa mundial de muerte, sobre todo en países desarrollados.
La mayoría de los pacientes con EPOC fuman o solían hacerlo, y tienen por lo menos 40 años al inicio de los síntomas. Aunque es poco común, puede presentarse incluso en menores de 40 años.
La exposición prolongada a irritantes pulmonares también es un factor de riesgo. Estos son: el aire contaminado, la presencia de vapores químicos, el polvo del medio ambiente o del trabajo y ser fumador pasivo.
La EPOC también puede provocar fatiga, respiración entrecortada y dificultad respiratoria a medida que los pulmones se van deteriorando. Las muertes por esta causa son cada vez más frecuentes, incluso más que las causadas por asma.
La experta manifestó que los broncodilatadores tiotropio y olodaterol, disponibles desde finales de julio en Paraguay, mejoran la calidad de vida de los fumadores gracias a su acción prolongada. “Mejoran el paso de aire y reducen la dificultad respiratoria. Reduce el número y gravedad de las exacerbaciones (recaídas bruscas) permitiendo volver a realizar actividades físicas”, expresa.
“La llegada de este tratamiento a Paraguay representa la posibilidad de que los tabaquistas cuenten con compuestos de primer nivel y gran calidad para el tratamiento de la enfermedad. Según los últimos estudios, la asociación tiotropio y olodaterol proporciona una mejoría clínicamente significativa en la calidad de vida”, reiteró.
La Cámara Paraguaya de Compañías de Investigación Farmacéutica (Capacinfar), cuenta con información sobre los tratamientos y medicamentos y está abocada a informar a la opinión pública sobre los avances en materia de tratamientos que mejoren la calidad de vida de pacientes en diversas patologías.