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“El uso de los cascos, cuyo fin fundamental es el de salvar vidas, ha sido distorsionado por estos delincuentes que sin ningún tipo de escrúpulo, ponen en peligro vidas y bienes”, es uno de los argumentos esgrimidos por los concejales municipales Hugo Ramírez y Yamil Esgaib, quienes presentaron una minuta para contribuir en la lucha contra la inseguridad.
Si bien el trasfondo de esta propuesta legislativa es combatir la delincuencia, considerando la también alta tasa de asaltos perpetrados por “motochorros”, se obvia que el número de accidentes de tránsito en motocicletas es mayor y el uso de los cascos verdaderamente es una cuestión de vida o muerte.
“De 17.500 accidentes de tránsito en el 2013, aproximadamente 12.500 involucraron a motocicletas. De esta última cifra, 400 fallecieron”, detalló el Dr. Aníbal Filártiga, director de Emergencias Médicas, en diálogo con ABC Color.
Días atrás el referente médico informaba que actualmente ya hay numerosas muertes por la resistencia de los mismos motociclistas al uso del casco. Informó que solo el 14% de los accidentados en moto que llegan a Emergencias usaron casco, y el restante “86% no hace un pito”.
A esta redacción especificó que los 400 motociclistas fallecidos estaban dentro del grupo de 86% que no contaba con el casco protector. Del restante 14% que sí llevaba casco, ninguno resultó víctima fatal.
Además especificó que del total de víctimas de accidentes en moto, alrededor de 1.000 sufrieron traumatismo de cráneo, “de los cuales 100 más o menos quedan con secuelas graves para toda la vida”.
Recordó que cuando no se usa el casco, las consecuencias son mucho más graves, porque no existe ningún tipo de protección. “El impacto es directamente el cuerpo, ya sea a los miembros o directamente al cráneo”.
Consideró que los concejales debieron hacerse asesorar antes de presentar una legislación de tal envergadura porque “afectará a demasiada gente y demasiados aspectos”. Mencionó que la delincuencia es sólo uno de ellos y abarca un pequeño porcentaje.
También Luis Christ Jacobs, director de la Patrulla Caminera, fue abordado sobre la propuesta. El mismo sostuvo que la idea de los ediles colorados es una “cuestión traída de los pelos” y recordó que el uso del casco protector “es una norma internacional de seguridad vial, que promueve principalmente la Organización Mundial de la Salud”.
Por su parte, el senador Eduardo Petta San Martín, exdirector de la misma institución, indicó que la misma ley 5016/14 Nacional de Tránsito y Seguridad Vial obliga a la utilización del casco. “No puede una ordenanza municipal quebrantar una ley nacional”, sentenció.