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El decreto 1.264 firmado por el presidente Horacio Cartes en febrero de 2014 regula el cambio de hora en el Paraguay. Otras medidas similares se habían impuesto por otros presidentes en el pasado. En este caso, el cambio se ordena el cuarto domingo de marzo para el horario de invierno y el primer domingo de octubre para el horario de verano. Esto significa que este domingo 2 de octubre la hora se adelantará en 60 minutos.
Las razones se reducen, dentro del decreto, en un pedido de la ANDE para aprovechar la energía solar. Al respecto, el profesor Blas Servín, del Centro Astronómico Bicentenario, explicó que desde equinoccio de primavera ocurrido el pasado 22 de setiembre la posición de la tierra en relación al sol hace que los días sean más largos. La luz natural entonces, se extiende por más tiempo.
En cuanto a la ciencia propiamente dicha, las horas se dividen en todo el planeta bajo el parámetro de los husos horarios, que son 24 en total. De allí las 24 horas. Estas líneas imaginarias, verticales, se separan en meridianos de 15 grados. El cambio de día ocurre en el grado 180, ubicada sobre el Océano Pacífico. El meridiano cero está marcado por el Observatorio Real de Greenwich, en Londres, Inglaterra.
El huso horario que le corresponde a Paraguay, geográficamente, es de 4 horas menos que el meridiano de Greenwich. Es decir, la hora que siempre debe permanecer en el país si se hace caso omiso a los decretos es el horario de invierno (-4 GMT).
El ingeniero Pedro Cuevas, gerente comercial de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), dijo que son dos los factores que motivan al cambio de horario dos veces al año. El primero es la seguridad ciudadana con un especial enfoque en los niños y jóvenes que van a clases temprano. Atrasar o adelantar la hora depende del periodo del año y, generalmente, coincide con el inicio de clases. En este periodo primaveral amanece más temprano y lo que se hará el fin de semana es adelantar una hora para aprovechar esa luz natural. Por la tarde, con el cambio horario, el día dura más y existe también una suerte de extensión con la luz natural, pues oscurece alrededor de las 19:00 y 20:00 a medida que más se acerca el verano.
El otro motivo es el efecto que causa este cambio estacional en el consumo de energía eléctrica tanto en lo comercial como en lo residencial. Con el cambio de hora, las luces de una casa se encienden más tarde y no coinciden en su totalidad con el uso industrial, explicó el ingeniero Cuevas.
Esto, según la autoridad de la ANDE, evitar una sobrecarga de energía eléctrica en un determinado momento. Informó además que la ANDE no piensa en ganancias o pérdidas para hacer este cambio, pero dijo que el consumo con el horario de verano se reduce en esa franja horaria, lo que posteriormente redunda en menos dinero para la empresa.
Cuevas celebró que el decreto del Ejecutivo que hace que la hora oficial cambie esté vigente y sea fijo, ya que hace que los cambios sean previsibles, lo que ayuda a establecer los parámetros técnicos para controlar las modificaciones.
Por su extensión de oeste a este, Brasil tiene cuatro husos horarios diferentes. La hora también se cambia en febrero y octubre. Argentina logró unificar su horario en uno único, pese a que su territorio está entre los husos horarios -4 y – 5 GMT. El Uruguay tiene un solo horario.