Cargando...
En Europa ya es normal conseguir boletos de avión desde un país a otro por precios de ida y vuelta que oscilan entre los G. 200.000 y 300.000 (entre 40 a 50 dólares). Los tramos son similares a las distancias entre Asunción y Buenos Aires o San Pablo, es decir, vuelos de hora y media de duración. En el viejo continente hay aerolíneas que ofrecen rutas entre Londres, París, Madrid, Lisboa o Berlín –por citar solo algunas ciudades– a precios de ganga. Empresas como la irlandesa RyanAir, la británica EasyJet o la noruega Norwegian, entre varias otras, son las que operan específicamente con este tipo de itinerarios y precios especiales.
En América, la tendencia comienza a propagarse. Una de esas empresas es la brasileña Azul, VivaColombia, VivaAerobús –en el norte de Sudamérica– o Virgin, SouthWest o AirCanada en Norteamérica son ejemplos empresariales de que volar no necesariamente debe significar un sacrificio grande de dinero.
Pero por qué existe una gran diferencia con estos precios y los de Paraguay. Las aerolíneas de bajo costo tienen una tasa preferencial especialmente en lo que tiene que ver con los aeropuertos. Por ello usan, generalmente, las terminales aéreas periféricas. Así, una aerolínea de bajo costo no aterrizaría, por ejemplo, en el aeropuerto internacional de Heathrow, en Londres, sino en el de Luton o en el de Stansted, que quedan a unos kilómetros de la capital y son más pequeños.
El diario El Observador del Uruguay publicó el caso de dos empresas que recibieron permiso en Argentina para poder operar con vuelos de bajo costo desde ese país a Asunción. Estas empresas son Alas del Sur y AmericanJet, ambas de capital argentino. En el caso de Alas, ofrecerán la conexión internacional con Asunción antes del 2022. Comenzaron conexiones entre Córdoba y San Pablo, y Río de Janeiro y Santiago de Chile. El caso de AmericanJet está aún en planificación.
El portal IP Paraguay publicó en mayo pasado sobre una visita de una delegación de los Emiratos Árabes Unidos que prevé invertir en Paraguay con una aerolínea de bajo costo. Esta empresa se llama SAR – Consultancy & Training y estuvo representada por el director de la empresa, Shareed Al Romaithi.
En ese artículo, el empresario explicó que el proyecto que manejan incluye la salida desde Paraguay hacia diversos itinerarios internacionales. La reunión estuvo encabezada por el viceministro de Relaciones Económicas, Rigoberto Gauto.
Otra de las diferencias que hacen a estas aerolíneas más baratas es la opción de pagar por el equipaje que se transporta. Por ejemplo, solo se puede llevar de forma gratuita un equipaje de mano, y los demás tienen un precio adicional. También está el caso de las comidas, que generalmente no están incluidas. En el caso de la europea RyanAir, hasta venden boletos de lotería.
En líneas generales, el modelo económico de estas empresas genera importantes ganancias y fomenta la competencia del rubro aeronáutico. Es el caso de RyanAir o de la línea económica de la española Iberia, denominada Iberia Express. Recientemente, hubo un caso de bancarrota de AirBerlín, una aerolínea de bajo costo y la segunda más importante de Alemania, que se declaró en quiebra, aunque esto estaría vinculado a unas maniobras hechas por su competidora, la gigante Lufthansa, que, por cierto, quiere comprar AirBerlín tras su declaración de quiebra.
Poder volar más barato y sencillo debería ser prioritario para conectar al Paraguay a otros países y facilitar el transporte de pasajeros a nivel regional.