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Este periodo las altas temperaturas puede provocar molestias tanto en la piel como en las vías respiratorias, y peor aún si hay un alto porcentaje de humedad por las lluvias que suelen registrarse en esta estación.
En esta época “en general hay mucha circulación de virus respiratorios, principalmente en niños”, introdujo el doctor Carlos Morínigo, neumólogo y Coordinador del Hospital Especializado. También las vías respiratorias se ven afectadas por la presencia de una importante cantidad de polen y polvo en el ambiente.
Señaló además que “las personas que sufren de asma y alergias son las que más sufren descompensaciones durante el verano, precisamente por procesos virales”. No se puede dejar de mencionar que durante este periodo “aparecen cuadros de bronquitis, resfríos y gripe, también llamada influenza”.
Los males que mayormente aparecen en cuanto a afecciones respiratorias “son los resfríos comunes, la bronquitis y la gripe o influenza”. Esta última incluso puede provocar “fiebre y en casos más graves afectaría ya los pulmones, es lo que se denomina también la neumonía atípica que es muy diferente a la bacteriana”.
La neumonía bacteriana se diferencia de la viral en que “tiene un inicio más solapado, provoca cuadros febriles pero con temperaturas no tan altas, también se ven afectados los pulmones, ocasionando una dificultad respiratoria”. No es igual a la ocasionada por acción de un virus, que es aguda y produce catarro marrón.
En cuanto a la bacteriana, “la misma resulta ser mucho más insidiosa en el organismo, provoca en la persona enferma un decaimiento general, en ocasiones dolores musculares, incluso una tos intensa”, detalló el especialista.
Para el caso de las neumonías virales no se precisa la medicación porque “el cuerpo las resuelve solo, excepto si ya son derivaciones por cuadros de influenza; sin embargo para el caso de la bacteriana sí se pueden combatir con antibióticos”.
La fiebre que se puede registrar “durante la temporada de verano resulta muy incómoda para muchos pacientes, que indican que es la sensación más desagradable del mundo”, por lo que debe estar bajo el aire acondicionado y ahí se le congestionan todas las vías respiratorias en ese momento.
Morínigo subrayó que el calor de nuestro país, principalmente, “propicia que la enfermedad tenga una mayor resistencia a desaparecer, es decir, perdure por mayor tiempo”.
Lo más común durante el periodo de altas temperaturas es estar en un ambiente fresco, con aire acondicionado, ya sea dentro de la propia casa, en la oficina, en un centro comercial o mismo un supermercado, donde hay una comodidad pero al salir afuera nos enfrentamos a un brusco cambio de temperatura.
“En el caso de los que se encuentran en ambientes con aire acondicionado, por lo general sufren de golpes de calor o temperatura lo cual afecta muchísimo al organismo, específicamente a las vías respiratorias”, manifestó el neumólogo sobre el caso citado anteriormente.
Para aquellos que cuentan con acondicionadores de aire en sus casas lo recomendable es “la limpieza de filtros de aires, para lo cual solo hace falta que uno aprenda como realizar la limpieza, pero utilizando tapabocas porque el polvo puede afectar el sistema respiratorio de la persona”.
Para los que van a estar en una pieza con el sistema de aire, “lo más recomendable es mantener el acondicionador en una temperatura promedio de entre 20° C y 24° C, y no entre 17° o menos, lo que pude ocasionar que la persona tenga frío”. Si el ambiente de la habitación está muy seco, lo mejor es colocar una botella o un vaso con agua para humedecerlo.
Otros casos que suelen presentarse también en el verano “son los cuadros gastrointestinales, como diarreas por virus, dolencias que se evitan con la higiene, tanto personal como la del hogar”. En este punto Morínigo resaltó la importancia del lavado de las manos, así como el de los alimentos para evitar la transmisión viral.
En la jerga común suele denominarse “peste” a este tipo de enfermedades que aparecen por estaciones, “pero se deben efectivamente por la influencia de virus que se encuentran en el ambiente”. Recomendó también especial cuidado con los alimentos pueden ocasionar problemas en el caso de que a alguno se le haya cortado la cadena de frío.
Explicó que actualmente los sitios en donde hay un alto riesgo de influencia de los virus son los distintos refugios instalados en la ciudad donde fueron ubicados los ciudadanos afectados por las inundaciones, pues el ambiente posibilita los contagios por el hacinamiento en esos lugares.
Entonces esta situación de aglomeración de seres humanos más las actuales condiciones climáticas y los sitios inundados crean un ambiente con mucha humedad y altas temperaturas, brindado las condiciones favorables para la propagación y esparcimiento de los virus.
Finalmente, el doctor Morínigo recomendó un especial cuidado en el campo de la higiene, con la eliminación de los criaderos de mosquitos para evitar el dengue, zika y chikunguña. Para los pacientes con asma y que presentan tos, instó a acudir al médico para el control.“La consulta precoz es importante”, resaltó.