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La aplicación móvil es un juego gratuito, cuyo desafío consiste en una carrera interminable que gana quien llegue más lejos, en la caótica ciudad de Asunción. Con una divertida réplica de las miles de dificultades que puede encontrar un peatón cuando transita por las calles de la capital.
Entre los obstáculos (jokoha) se encuentran: bache de la Essap con hule y botella de vidrio, basura por recoger en la vereda, "móto mondaha", autos cruzando semáforo rojo, Línea 9, 23, 26, patrullera con policías en la carrocería, motocarga cargada de cartones y un árbol, motocarga con una señora, un mitã'i, una garrafa, una heladera y un jagua, ambulancia del SEME y camioneta con gente en la carrocería.
En esta interesante iniciativa digital -demás de entretener- busca hacernos reír un poco de las adversidades diarias por la manera en que vivimos. De alguna manera constituye también una crítica al estado en que se encuentra la ciudad de Asunción, que es nada más y nada menos que la capital nacional.
Los cables del tendido eléctrico se observan enredados y los buses despiden humo negro. El entorno de la ciudad tiene sitios emblemáticos como el Panteón de los Héroes, la antigua Estación de Ferrocarril y el Cerro Lambaré.
“La idea principal fue hacer un juego en guaraní y después en el proceso creativo ya decidimos hacer algo referente a la capital. Hicimos un juego con un poco de crítica social y para hacer un honor a nuestro idioma que en tecnología está tan olvidado”, expresó André Darugna, programador y uno de los ideólogos de esta app.
Por otra parte, en el trayecto virtual el jugador se encontrará con conocidos personajes (poguasu) de la política, deportes y la farándula paraguaya: “Presi, El mariscal, Pa'i, Zorro coimero, Miss Tanga 2005, Reina Mundial 2010, Hetere'i tembi'u, Galaverga y Yo Linda Park”. A quienes según André Darugna le modificaron los nombres para evitar problemas. El personaje más caro cuesta G. 3.500 en monedas virtuales.
Estos pueden ser desbloqueados gracias a monedas (pirapire) de juego que uno debe ir juntando durante su trayecto. Por ejemplo, una chipá vale 100 monedas y un tereré, 10.
Jokoha Run fue desarrollado por diversión, sin compromiso con la realidad, pero con una pizca de crítica social.
La app está disponible para descarga gratuita en las tiendas App Store y Play Store, compatible con smartphones y tablets iOS y Android. Además también se puede buscar Jokoha Run en las tiendas de dispositivos móviles, como también acceder al sitio web oficial. Una vez que tengas el juego, podés “empezar” (ñepyrũ).
El primer personaje que se puede usar es el Presi, este va caminando a toda velocidad por el trayecto en el cual inmediatamente aparecen motos o automóviles; si el personaje no salta a tiempo, ya sea antes o después, y cae o este obstáculo choca al personaje, muere: ¡Game Over! (¡Amóntema!). Solo pasando por el resorte y saltando luego es posible superar a los autobuses para seguir adelante, ya que algunos inclusive circulan de a dos.
También existe la posibilidad de caer en un bache que en realidad tiene apariencia de riacho como suele suceder en la vida real de Asunción.
De acuerdo a cómo se avanza la dificultad va aumentando. “Como es un juego difícil hace que la gente se vaya superando porque cuando parece que estás tranquilo, viene un auto a toda velocidad”, explicó el creador.
Los power uts, ayuda o poderes extras, son el carrulim, el cual te permite dar un salto doble por dos segundos, la sopa paraguaya te brinda invencibilidad por cinco segundos y el resorte permite el salto alto para esquivar los colectivos.
El juego se elaboró en un mes, tiempo que ya incluyó el proceso de creación, diseño y desarrollo. Además de André Darugna, trabajaron otras dos personas más: Karen, como creativa, y María José, como diseñadora.
Darugna explicó que para hacerlo en nuestra lengua nativa fueron consultando con varios parientes y también usaron diccionarios porque hay ciertas especificaciones que al escribirlas son más complicadas. “Tenemos muchos desarrolladores paraguayos pero nadie se interesó en hacer valer nuestra lengua oficial”, concluyó.