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Unas 1.900 personas ya fueron beneficiadas en los cuatro años que lleva la campaña, que busca descentralizar las cirugías estéticas ejecutadas por profesionales del Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (Cenquer).
El Dr. Bruno Balmelli, director del Cenquer, indicó que el primer objetivo es llevar a los profesionales cirujanos plásticos hasta los lugares donde están los pacientes. Manifestó que en el interior del país encontraron pacientes que precisan cirugías más complejas, que requieren de mayor atención, pero por falta de dinero o movilidad no accedían al servicio.
“Los profesionales cirujanos quieren que un paciente que tiene una cicatriz o un defecto que quiere corregir para mejorar su calidad de vida o su autoestima pueda acceder a la cirugía. Esa es nuestra misión para con las personas de escasos recursos: mejorar su calidad de vida”, dijo el doctor Balmelli.
El programa Ñemyatyrô tiene 4 años y lleva ya 22 jornadas de cirugías mediante las cuales ya fueron beneficiados más de 1.900 pacientes con problemas de alta, mediana y baja complejidad.
“El programa lleva cuatro años y cada año programamos unas seis jornadas de cirugía en el interior del país. Vamos seleccionando las zonas donde estaremos y allí hacemos dos viajes: uno donde captamos a los pacientes, los seleccionamos, y luego en el siguiente viaje hacemos las cirugías”, dijo el cirujano.
Polidactilia en manos y pies, defectos congénitos, quistes sebáceos en rostro, cicatriz posquemadura, tumores cutáneos y en párpado, verrugas múltiples y cáncer en la piel son algunos de los males a ser tratados durante las jornadas realizadas en los hospitales regionales. Este año fueron a Misiones, Itapúa y Caazapá; este mes estarán en Cordillera y, en diciembre, la última jornada será en el Hospital Nacional de Itauguá.
De acuerdo al reporte, las edades de los beneficiados con estas cirugías especializadas oscilan entre los 5 meses y los 81 años, en su mayoría de la franja femenina.
Uno de los ejes son las cirugías reconstructivas que benefician a las personas de escasos recursos. En cuatro años del programa ya suman 1.900 personas beneficiadas.
El segundo eje es la capacitación a los niños mediante jornadas en las escuelas en donde se les enseña cómo prevenir las quemaduras y cómo tratarlas.
El tercer eje es la capacitación al personal de blanco. Se realiza cursos de atención básica inicial al quemado para los profesionales de los hospitales del interior.
“Primero hacemos las cirugías, pero eso no termina allí. Capacitamos también a los niños para que se puedan prevenir las quemaduras y por último hemos hecho ya 22 cursos de capacitación para los profesionales del interior del país. Con esto, nos damos cuenta de que los pacientes con quemaduras llegan del interior mejor tratados. Además, si son quemaduras leves son tratados en sus localidades y las quemaduras complejas llegan al Centro del Quemado con mejor tratamiento inicial”, dijo el doctor.
Durante las jornadas de captación de pacientes llegan a ser anotadas unas 300 personas, de las cuales 100 quedan para las cirugías, otras van para la fisioterapia y los casos más complejos son reagendados para otro día.
“Malformaciones muy complejas, que necesitan de terapia intensiva, son realizadas en Asunción y los casos menos complejos se hacen en los hospitales regionales. La mayoría de los pacientes que tenemos son con quemaduras, cicatrices patológicas por accidentes de tránsito, paladares hundidos y cáncer de piel”, manifestó Balmelli.
El doctor Balmelli indicó que tienen algunas cirugías que rondan los G. 2 millones y otras que van hasta los G. 20 millones, si bien el gasto operativo de las cirugías está presupuestado por el Ministerio de Salud y los pacientes no gastan en insumos. “Tenemos cirugías menos costosas y otras muy costosas. Tenemos desde G. 2 millones y otras van hasta G. 20 millones, por eso sacamos un promedio de gasto de G. 10 millones por cada cirugía que absorbe el Estado”, dijo Balmelli.