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A más de 11.000 kilómetros de Paraguay, allá en el país euroasiático, Braian José Samudio Segovia está ganando protagonismo en la TFF Primera División de Turquía, que viene a ser la segunda categoría del fútbol turco.
Actualmente juega de delantero, pero también sabe hacerlo de volante. El paraguayo de 22 años milita en el Çaykur Rizespor y es una de las sensaciones del balompié turco. Sus 14 conversiones en 22 compromisos son los argumentos del chico que admira a Roque Santa Cruz y Lionel Messi.
Samudio es uno de los tantos jugadores paraguayos que no pudieron debutar en la máxima categoría del fútbol nacional y emigraron a otras tierras. Y si bien aún no lo ha hecho, por la campaña de su equipo y más aún por la individual, es prácticamente un hecho que ese momento llegará este año.
El oriundo de Ciudad del Este comenzó a dar sus primeros pasos en este apasionante mundo en la escuela de fútbol de Club Atlético Fortaleza, ubicada cerca de su casa. “Jugué hasta los 17 años. Tuve la oportunidad de irme a España”, comentó Samudio.
En el país peninsular estuvo en el Club Deportivo Comarca de Níjar y Club Deportivo Dénia, clubes que actualmente militan en la Tercera División (cuarta categoría) y la División Regional (quinta categoría).
“Al volver jugué por un año y medio en el 3 de Febrero”, dijo refiriéndose al 2014 cuando estuvo en la Reserva y al año siguiente ya lo hizo en la Intermedia. “Luego tuve la chance de irme a Brasil y fue donde mi carrera comenzó a despegar. Ganamos el campeonato de la Tercera División de Brasil”, añadió.
En el 2016, Samudio llegó a la tierra mágica del fútbol para militar en el União Agrícola Barbarense Futebol Clube, del Campeonato Paulista Serie A2. Posteriormente pasó al Boa Esporte Clube, equipo con el que logró el ascenso a la Serie B y fue fichado por el Guarani Futebol Clube.
“Mi paso por Brasil fue la parte vital de mi carrera. Tuve la oportunidad de trabajar a un alto nivel, trabajar la fuerza, la velocidad y la técnica por sobre todo. Tuve una escuela muy buena, aprendí mucho en Brasil”, reflexionó el paraguayo.
El esteño se encuentra en Turquía desde hace siete meses. “Vine para el inicio de la temporada. El entrenador de Rizespor se fue a Brasil para verme. Hablamos y me dio la oportunidad de estar acá”, reconoció.
Y fue un gran acierto del técnico İbrahim Üzülmez, ya que el futbolista guaraní está respondiendo con goles para que el equipo se encuentre en lo más alto de la tabla y esté pesando seriamente en el ascenso.
La charla de ABC con el jugador se produjo horas después del triunfo del Rizespor por 3-0 ante el Balıkesirspor, en el que precisamente Samudio fue el autor del tercer y último tanto del equipo que saltó a la cima del torneo con 44 unidades.
Acerca de la comunicación en el país transcontinental, el esteño está “aprendiendo el idioma. Dos veces a la semana tengo clases de turco. También se aprende en el día a día”. Además, en el equipo cuentan con un traductor y pasa las indicaciones del técnico al portugués, “porque hay dos brasileños en el plantel”.
Ser jugador de fútbol fue su eterno objetivo. “Desde que tengo uso de razón estoy detrás de la pelota. De niño ayudaba un poco a mis padres, iba a la escuela, al colegio, pero siempre jugaba a la pelota”, rememoró.
Como todo paraguayo, llegar a defender algún día la camiseta de la Albirroja es su sueño. “Es mi mayor motivación para seguir trabajando: esperar un llamado a la selección. Intento aprovechar a lo máximo este fútbol, hacer más goles y esperar un llamado de la selección”, sentenció el goleador del Rizespor que está a préstamo en la institución hasta mayo.
@neryjavier8